Cada primer domingo de mayo se celebra el Día Mundial de la Risa. Más allá de recordar los beneficios de esta expresión genuina del ser humano, esta fecha tiene como finalidad promover la risa como emoción positiva para contribuir a la paz mundial.
Vale mencionar que el estrés y las preocupaciones del día a día incrementan los niveles de depresión y ansiedad en las personas. Por esta razón es importante fomentar la risa como un hábito saludable en nuestras vidas.
En 1998, Madan Kataria, fundador del movimiento ‘Yoga de la Risa’, tuvo la iniciativa de crear este día y propuso que se celebrara cada primer domingo de mayo. Desde entonces, el Día Mundial de la Risa es utilizado por la población a nivel mundial para desconectarse por un momento de su jornada diaria y compartir momentos agradables en grupo.
La risa, además de manifestar la alegría que siente una persona, contribuye a su bienestar físico y mental. A continuación, conoce qué beneficios para la salud trae el reírse.
La risa es capaz de bajar nuestra presión arterial. Aunque el reír aumenta nuestra frecuencia cardíaca y, por lo tanto, incrementa nuestra presión arterial, cuando nos relajamos se produce el efecto contrario.
Cuando nos reímos los músculos de los pulmones trabajan mucho más rápido. Con cada inhalación se absorbe más oxígeno y la frecuencia cardíaca es más alta, por lo que los órganos y tejidos reciben más oxígeno del normal.
La risa pone en funcionamiento distintos músculos que normalmente están inactivos. A esto se suma una posterior relajación muscular que contribuye al bienestar que reír nos otorga. Reírnos puede ayudar a mantenernos en forma.
Los cambios hormonales que se producen en nuestro organismo mientras reímos podrían tener un efecto de estimulación del sistema inmunitario. En ese sentido, la risa puede hacer que nuestro cuerpo sea más efectivo tanto al detectar bacterias y virus como al iniciar los procesos enfocados a neutralizarlos y eliminarlos del organismo.
Cuando reímos, el cuerpo deja de generar tanto cortisol, una hormona que está relacionada con el estrés. La risa puede llegar a tener incluso propiedades analgésicas, las cuales nos hacen más resistentes al dolor.