Si buscas alejarte del romance en octubre, la nueva serie coreana original de Netflix es para ti. Jeon Yeo Bin regresa a las pantallas completamente irreconocible con este proyecto luego de “Vincenzo”. Tras haber sido una abogada audaz en el popular k-drama de temática legal, la actriz se pone en la piel de una mujer que aparentemente entró en contacto con los extraterrestres en “Anomalías”, thriller de ciencia ficción recién estrenado en el streaming.
Nana, conocida exidol del k-pop, se une a “Glitch” (título internacional) en el rol de una alocada miembro de un club de fanáticos de los ovnis.
Dirigida por Roh Deok, con el guion de Jin Han Sae, “Anomalías” sigue en 10 capítulos los misterios en torno a la desaparición del novio de una chica y su relación con los alienígenas.
Hong Jihyo era una apasionada de los extraterrestres en la secundaria, pero deja a un lado su pasatiempo al llegar a la adultez. Ella decide que quiere llevar una vida normal; sin embargo, los extraños entes de otro planeta que comenzaron a aparecer en su camino, conforme avanzaba en edad, harán difícil su cometido.
Un día, su novio desaparece completamente de la faz de la Tierra. Convencida de que fue abducido por extraterrestres, Ji Hyo se unirá a un estrafalario club de buscadores de ovnis en un intento desesperado por hallarlo.
En esa sociedad, Hong se reencontrará con Heo Bo Ra, una examiga de la escuela a quien introdujo las ideas de los objetos voladores no identificados. Para su sorpresa, aquella chica, quien era calificada como una delincuente juvenil en el colegio, ahora es la verdadera fanática de los extraterrestres.
Junto a su vieja amiga Bo Ra y los otros miembros del club, Ji Hyo irá tras los pasos de su novio. En ese proceso, irá conectando la desaparición de su pareja con la conspiración de una secta religiosa llamada Luz Divina, un caso de suicidios masivos, el avistamiento de ovnis que se produjo en Corea del Sur en los años 70, los misteriosos símbolos de apariciones de alienígenas y los borrosos recuerdos de la abducción de la que ella misma habría sido objeto en sus días de colegiala.