El 16 de julio de 1992, a las 9.15 p. m., la calle Tarata se tiñó de sangre y quedó destruida. Ahora, 30 años después, ya quedó atrás ese día en el que Sendero Luminoso llenó de oscuridad a una Miraflores despreocupada y obnubilada en el marco de un conflicto armado interno.
Aun así, dicho atentado y la grave problemática en el que está englobado han quedado grabados como cicatrices profundas en quienes fueron protagonistas o recibieron daños colaterales de la violencia.
Por ello, te dejamos cinco películas peruanas que retratan, desde más de una perspectiva, la época de terror que se vivió en nuestro país.
Las fuerzas del orden peruanas toman el control de Chuspi, un pequeño pueblo de la ‘zona de emergencia’, amenazado por el movimiento subversivo Sendero Luminoso.
Sin la estrategia ni el mando apropiado, Vitín Luna y sus compañeros deben enfrentarse a un ejército invisible que parece superior.
Todo cambia con la llegada del oficial Iván Roca, estricto en la disciplina y casi brutal en el castigo, que se presenta como un hombre capaz de combatir la subversión hasta aniquilarla.
Juan vive una infancia pobre pero tranquila al lado de sus amigos Pacho y Rosita. La paz se termina cuando su padre es asesinado y el muchacho descubre que Fermín, su padrastro, está implicado en el crimen.
Fermín entrega a Juan a los terroristas para garantizar su silencio. Así empieza la tragedia de un niño que, como tantos otros, es obligado a integrar las huestes terroristas.
Entrenado para matar sin piedad, el pequeño no se acostumbra a su nueva condición y huye a su pueblo para alertar de la llegada de los asesinos.
Carlos Zambrano y Gabriela Coronado, dos integrantes del Grupo de Inteligencia de la PNP (GEIN), tienen como objetivo la captura del líder senderista Abimael Guzmán, de quien no se conoce su paradero desde hace más de 10 años.
En esta implacable búsqueda, los agentes trabajarán bajo la fachada de ser pareja y casi sin darse cuenta terminarán en una complicada e intensa relación que los pondrá en la mira del Servicio de Inteligencia, la CIA y del mismo Sendero Luminoso.
En esta espiral de guerra, solo les quedará confiar el uno en el otro.
La película narra la historia de una familia miraflorina compuesta por Claudia, Daniel y sus hijos Elías y Sofía.
La vida de ellos se desarrolla con mucha normalidad hasta que son sorprendidos por el atentado terrorista en la calle Tarata, con lo cual Claudia sufre una pérdida muy grande que la hará reaccionar ante hechos que pasaron frente a ella durante mucho tiempo.
Tras el asesinato de Pedro por los militares, la denuncia presentada por su padre resulta infructuosa.
Dos miembros del grupo terrorista Sendero Luminoso intentan captarlo a él y a su familia para que se integren en la organización. Aunque rechazan la propuesta, los miembros del Servicio de Inteligencia dan por hecho lo contrario y hacen desaparecer al padre.
Su esposa y su hijo lo buscan sin éxito en diferentes comisarías y cuarteles. También piden ayuda al obispo de la ciudad, pero este justifica las acciones militares como respuesta a los actos terroristas.