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Cine y series

Patrizia Reggiani: la oscura historia de la ‘Viuda negra de la moda’ que encarnará Lady Gaga

La película House of Gucci revivirá uno de los casos italianos más impactantes de la década de los 90. El último de los Gucci murió en medio de una lucha familiar por el dinero, el estatus y la moda.

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Patrizia Reggiani fue condenada por planificar el asesinato de su exesposo. Foto: composición/Metro-Goldwyn-Mayer/IMDB

Ni cuando era escoltada a la cárcel Patrizia Reggiani dejó la moda de lado. Con gafas de sol oscuras y un abrigo de piel, la mujer aceptó su condena, pero también el pasar a la historia policial de Italia por mandar a matar a su exesposo. Parte de su vida será llevada al cine en la película House of Gucci, donde Lady Gaga la interpretará.

Con el próximo estreno, la historia y las consecuencias que tuvo la muerte de Maurizio Gucci en 1995 han vuelto a la salir a la luz. La denominada ‘Viuda negra de la moda’ por la prensa italiana ve su caso revivir este 2021.

Mauricio y Patrizia Gucci eran la pareja favorita del jet set italiano

Reggiani nació en Milán y creció cerca a los grandes círculos sociales. En una fiesta conoció a Maurizio Gucci. “No pensé mucho en él al principio”, le dijo a The Guardian en el 2016. “Era solo un chico tranquilo más”. Tras enamorarse, se casaron en 1972.”Éramos una pareja hermosa y teníamos una vida similar”, le dijo al medio.

Con el paso de los años, tuvieron dos hijas, Alessandra y Allegra Gucci, lo que provocó que la familia viva entre un chalet de esquí en Saint Moritz, una casa de vacaciones en Acapulco y una granja en Connecticut.

La muerte del padre de Mauricio cambió su vida para siempre

Cuando murió Rodolfo Gucci en 1983, Maurizio quedó como su único heredero con una participación del 50% en la fortuna familiar. “Maurizio se volvió loco. Hasta entonces yo era su asesora sobre todos los asuntos de la marca, pero él quería ser el mejor y dejó de escucharme”, mencionó Patrizia en el 2016.

Con problemas financieros, las cosas en la casa de los Gucci no era la mejor. En 1985, Mauricio dejó a Patrizia, se fue de casa y nunca volvió. Años después, ella descubrió que su esposo había contactado con Paola Franchi, su ahora pareja. Los Gucci se separaron finalmente en 1991.

De acuerdo al libro Grandes dinastías del 2010, Maurizio Gucci emprendió un camino empresarial complicado, ya que no solo él estaba encargado de la marca de lujo, sino también su familia. Tíos, primos y personajes relacionados a él esperaban que se equivocara.

Patrizia y su diagnóstico médico

En 1992, a Patrizia le detectaron un tumor cerebral, el cual fue eliminado sin grandes consecuencias. En medio de esto, ella le pidió a su exesposo que cuidara a las niñas, pero él se negó. Con más de un problema entre los dos, el libro House of Gucci, de Sara Gray Forden, menciona que la mujer juró acabar con su expareja tras su falta de interés y relación con Paola Franchi.

El asesinato de Maurizio, el último de los Gucci

La muerte de Murizio Gucci se dio a las 8.20 a. m. del 27 de marzo de 1995. El hombre de 46 años salió de su casa para ir a trabajar, pero 15 minutos después recibió cuatro disparos cerca a su oficina en Milán. Según los testigos, fue asesinado por un asaltante común, pero la Policía estableció que fue un sicario.

Dos años de investigación y la condena a Patrizia Reggiani

No fue hasta casi dos años después, en 1997, que un aviso anónimo apuntó a Ivano Savioni, el portero del edificio donde trabajaba Gucci. Este había sido contactado por la psíquica personal de Reggiani, Guiseppina Auriemma, para que la ayudara a contratar al asesino a sueldo Benedetto Ceraulo y al conductor del automóvil de la fuga Orazio Cicala. Con más de un testimonio, se determinó que la autora intelectual fue Patrizia, a quien ya la prensa italiana llamaba la ‘Viuda negra de la moda’.

Patrizia Reggiani, viuda de Maurizio Gucci, ingresando a la cárcel. Foto: Cordon Press

La Policía logró juntar pruebas contra Patrizia y descubrió que había contratado sicarios para matar a su exesposo. Ella les habría pagado 375.000 dólares para cometer el crimen.

En junio de 1998 fue juzgada por un tribunal de Milán y condenada a 29 años de prisión. Con sus hijas alegando que su madre había quedado mentalmente inestable tras el tumor cerebral, la condena fue reducida a 26 años. Patrizia terminó cumpliendo 18 años de su sentencia. En 2016, salió de la cárcel.