Hace unos días se estreno Madre solo hay dos, la nueva serie mexicana de Netflix que en poco tiempo se ha posicionado como la más vista en Perú.
Protagonizada por Ludwika Paleta y Paulina Goto, la ficción combina la comedia con el drama con el objetivo de reinventar el formato de la telenovela. Temas como los roles de género, la diversidad sexual y la maternidad, han sido incluidos en la trama.
Creada y escrita por Carolina Rivera y Fernando Sariñana para Netflix, la serie gira en torno a la historia de dos mujeres que son muy diferentes y que chocan entre sí, pero por cuestiones del destino tendrán que hacer a un lado sus diferencias.
Ambas descubren que sus bebés fueron intercambiados al nacer, por lo que deciden vivir juntas, esto a pesar de no tener nada en común y no soportarse.
En el último episodio, Ana (Ludwika Paleta) descubre que tiene un bulto en el pecho, por lo que va a la clínica para descartar cáncer de mama. En otro escena, y queriendo despejar la mente, acompaña a Mariana a una fiesta, se emborracha, le da un beso al personaje de Paulina Goto y termina en el hospital por un golpe.
Al lugar llega Juan Carlos, quien está ahí por una pelea con Daniel, el exnovio de Ana. Tras descubrir la infidelidad de su esposa, se marcha de su casa y busca a Tere.
Más adelante, se ve a las dos madres acordar que bautizarán a Valentina y deciden realizar un ritual de bienvenida a Regina. Dos semanas después, en medio del festejo, Ana descubre que la amante de su esposo es Tere, por lo que decide exponerlos. Ella le cuenta lo sucedido a Mariana, pero la mujer le indica que ya sabía sobre esa relación. Ana la saca de su casa por ocultárselo.
Madre solo hay dos finaliza con Mariana despidiéndose de Valentina y buscando a Pablo. Por otro lado, vemos a Ana recibiendo los resultados de la biopsia, a Juan Carlos dejando su casa y a Tere alejándose de su hija.
Con más preguntas que respuestas, Netflix todavía no ha dado información sobre si Madre solo hay dos tendrá temporada 2.