La misión Cluster es un programa de la Agencia Espacial Europea (ESA) que comenzó en el año 2.000 con el lanzamiento de cuatro naves espaciales idénticas, diseñadas para operar como satélites. Los dispositivos fueron colocados en órbita terrestre, formando una figura tetraédrica para permitir la obtención de datos tridimensionales de la magnetosfera y sus interacciones con el viento solar. En septiembre de este año, uno volverá a la Tierra.
"Esto marca el final de la histórica misión, más de 24 años después de que fuera enviada al espacio para medir el entorno magnético de la Tierra", expresó la ESA en un comunicado oficial sobre el retorno del satélite. En su mensaje, la agencia también dio a conocer que el siguiente paradero del satélite será en una zona deshabitada cerca de Chile y Perú.
Salsa fue desactivado en 2021, pero recién se confirmó su retorno a la Tierra. Foto: ESA
La misión Cluster es una misión de observación científica destinada a estudiar la interacción del viento solar con la magnetosfera terrestre. Compuesta por la constelación de cuatro satélites, su objetivo principal es comprender mejor los procesos físicos que ocurren en esta región, que actúa como un escudo para el planeta de la actividad solar.
Cluster ha permitido a los investigadores observar y analizar el comportamiento del campo magnético y perturbaciones en tiempo real. También ha contribuido a la mejora de previsiones del clima espacial y el conocimiento de los impactos en las redes eléctricas terrestres.
"Llamamos 'clima espacial' a la influencia del viento solar en el entorno magnético de la Tierra. Y hasta que apareció Cluster, el clima espacial seguía siendo un misterio", afirma la ESA.
Los cuatro satélites de la misión Cluster son apodados Rumba (Cluster 1), Salsa (Cluster 2). Samba (Cluster 3) y Tango (Cluster 4). La ESA ha confirmado el retorno de Salsa para septiembre del 2024 y ha informado que aterrizará en una zona deshabitada en las costas de Chile y Perú.
Cluster no había sido diseñada para durar tanto tiempo, según indica la agencia. Inicialmente, su objetivo era estudiar la interacción entre el Sol y la Tierra durante dos años. Pero, la ESA mantuvo a los satélites en funcionamiento, debido a los avances en la obtención de información.
La reentrada será llevada a cabo de manera dirigida y convertirá a Cluster en un pionero en la mitigación de desechos espaciales porque el equipo a cargo está controlando que ningún fragmento que no logre descomponerse caiga cerca de la Tierra. Asimismo, indicaron que están buscando la forma de observar la llegada del satélite desde un avión.
"A pesar de que estamos seguros de que ningún fragmento superviviente caerá cerca de la Tierra, todavía tenemos muy pocos datos sobre cómo se comportan las naves espaciales a medida que pasan por las capas inferiores de la atmósfera", precisa la ESA.