Un equipo de científicos ha descubierto que el sildenafilo, el principio activo del medicamento Viagra, está asociado a un 69% menos de riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, a diferencia de los no usuarios. Este fármaco es conocido globalmente por su efectividad para tratar la disfunción eréctil y la hipertensión pulmonar.
La investigación se basó en los datos de 7,23 millones de pacientes de la Clínica Cleveland, en Estados Unidos, a quienes se les monitoreó durante seis años.
Según las conclusiones del artículo publicado en Nature Aging, el consumo de Viagra en altas dosis incrementó el crecimiento de las neuronas, mientras redujo en ellas la acumulación de las proteínas tau. Estas proteínas anómalas, junto a las betas amiloide, forman placas anormales en el cerebro y suelen ser indicadores de demencia.
Además, esta menor incidencia de Alzheimer en los usuarios de Viagra fue notable en comparación con quienes ingirieron otros medicamentos potenciales para la demencia.
Así, a comparación de los consumidores de losartan y metformina, el riesgo de quienes tomaron Viagra fue menor en un 55% y 65% respectivamente. Otros fármacos como diltiazem y glimepirida también fueron monitoreados en el estudio.
La asociación entre el sidenafil y el menor riesgo de Alzheimer fue hallada con notoriedad en individuos con enfermedad arterial coronaria, hipertensión y diabetes tipo 2. Todas estas comorbilidades están asociadas con el riesgo de la demencia.
Sin embargo, el doctor Feixiong Cheng, líder de la investigación, destaca que una asociación no indica causalidad, puesto que pueden también estar involucrados distintos factores genéticos que favorezcan el desarrollo de Alzheimer. Por ello, sostiene que serán necesarios más estudios que demuestren su eficacia en personas con la enfermedad.
“Ahora estamos planeando un ensayo mecánico y un ensayo clínico aleatorizado de fase II para probar la causalidad y confirmar los beneficios clínicos del sildenafilo para los pacientes con Alzheimer”, dice Cheng.
De todas maneras, según Cheng, el hallazgo abre un camino para estudiar el sildenafilo como un potencial tratamiento para este tipo de demencia.