Los más afectados por los revendedores son el público de menores ingresos económicos, ya que al duplicarse los precios no pueden adquirir los boletos., Adquirir un boleto para asistir a un partido de la selección nacional se ha convertido en un verdadero vía crucis para los hinchas. A los altos precios y las largas colas se le suma el problema de los revendedores, quienes compran la mayoría de entradas para venderlas luego al doble de su precio. Sin embargo, la reventa podría convertirse en delito si el proyecto de ley que la prohibe presentado por el parlamentario José Luna se aprueba. Revender boletos sería tipificado como falta en el código penal y quienes lo cometan serían sancionados con prestación de servicio comunitario. “Afecta a miles de consumidores que asisten a espectáculos públicos y ante la presencia de revendedores se ven obligados a adquirir sus entradas a precos muy por encima de su valor real”, dijo el parlamentario. Según Luna, la reventa debe ser sancionada porque promueve la estafa con entradas falsas y también genera grandes ganancias que no sufren descuentos impositivos al ser ventas ambulantes. Además, recordó que revender boletos ya está prohibido en países como Uruguay, Chile, Argentina, España, Francia, entre otros.