Comunicado. Estado debió llamar a concurso público, afirman. Iniciativa de García es un ‘despropósito’ y un ‘acto de desprecio’ que empobrece a la ciudad, sostienen. Redacción. La República. “Los gobernantes no son dueños del espacio público y no pueden hacer con él lo que les da la gana”. Así empieza un pronunciamiento firmado por 60 intelectuales peruanos que rechazan la colocación del llamado Cristo del Pacífico, una imitación del brasileño Cristo del Corcovado, en el histórico Morro Solar del distrito de Chorrillos. El referido pronunciamiento ha sido firmado por personalidades como el escritor Alfredo Pita, la gestora cultural Ana Sofía Toguchi, los escritores Eduardo Adrianzén Herrán y Germán Carnero Roque, el crítico y curador de arte Gustavo Buntinx, el arquitecto Juan Tokeshi Gusukuda, la escritora María Emma Mannarelli, la artista Susana Torres, el catedrático Víctor Vich, entre otros. Pérdida de identidad Ellos refieren que no se puede continuar construyendo nuestra modernidad sobre la base de imitaciones y copias. “Las distintas ciudades del mundo son atractivas por sus particularidades locales, y una capital como Lima (y un país tan pleno como el Perú) no debe perder su identidad improvisando versiones degradadas de monumentos de otros contextos”, se lee en el comunicado. Finalmente, los intelectuales sostienen que la colocación arbitraria del Cristo del Pacífico en el Morro Solar corresponde a una “tradición autoritaria” que ellos rechazan. En ese sentido, han hecho un llamado a los nuevos gobernantes a que corrijan esta acción que ‘ofende’ su trabajo y su creatividad. Faltan políticas culturales Los intelectuales denunciaron la ausencia de políticas culturales en el país, lo que ha devenido en una ‘perversa inercia’ de las autoridades acostumbradas a trabajar al margen del sector artístico. Ello, argumentan, ha conducido al favorecimiento de intereses particulares “para dudosos emprendimientos monumentales”, como el Cristo del Pacífico, estatua de resina donada por la Asociación Odebrecht Perú. ”En el Perú existen importantes artistas y colectivos culturales de primer orden que casi nunca son convocados por las autoridades para enriquecer el espacio público con la potencia de sus símbolos”, lamentaron.