Coronavirus en Perú: contagios subieron en 35% en las últimas dos semanas

Si bien aún no se puede afirmar que ya se inició la tercera ola de contagios de COVID-19, hay datos concretos que indican el incremento de casos a nivel nacional en las últimas dos semanas.

Y es que de acuerdo con la medición que hace Essalud en función de los datos del Minsa, los contagios pasaron de 6.962 a 9.386 en las últimas dos semanas. Es decir, hay un aumento del 35%. En cuanto a los fallecidos por COVID-19, se elevaron de 200 a 241 por semana, lo que demuestra un incremento de 21%.

También hay un aumento de hospitalizados. En el caso de Essalud, la ocupación de camas pasó de 1.606 el 1° de noviembre a 1.799 en la última semana (es decir, incrementó en 193). Y en cuanto a la ocupación en camas UCI, pasó de 331 a 372 (es decir, aumentó en 41) en la última semana, señala Dante Cersso, jefe de la Unidad de Inteligencia y Análisis de Datos de Essalud.

Respecto a Lima metropolitana, el aumento de contagios se viene dando en 14 distritos, principalmente en Lima norte: Los Olivos, Comas, San Martín de Porres, Independencia, Carabayllo y Puente Piedra; y por Lima sur, el punto es San Juan de Miraflores (ver infografía).

Otro punto importante es la tendencia de incremento en los contagios por rango de edad. Dante Cersso explica que hace cuatro semanas se observaba un aumento de casos en las personas de 60 a 69 años; sin embargo, ahora se está dando en grupos de 30 a 35 años y de 50 a 79 años. Asimismo, en adolescentes y jóvenes de 15 a 19 años.

“De lo que veíamos antes, de 60 a 69 años, ahora está sucediendo en otros rangos de edad. Por eso es importante mencionar que el Gobierno ha programado la tercera dosis para los adultos mayores y para el personal de salud; no obstante, hay que precisar que los adultos mayores de 70 a 79 años no están asistiendo a su vacuna de refuerzo”.

Explicó que de las personas de este grupo que están programadas para la tercera dosis, solo el 16% acude a un centro de vacunación. “Hacemos el llamado a la población para que se ponga la vacuna”, añadió Cersso.

Esto es ratificado por el viceministro de Prestaciones y Aseguramiento en Salud del Minsa, Augusto Tarazona, quien refirió a La República que en las últimas dos semanas los contagios se han elevado. Advirtió que durante once semanas teníamos un promedio de 5.000 casos; sin embargo, en la penúltima semana se dio un incremento de 7.000, pero la subsiguiente bajó a 5.000. “Esto nos alerta de un incremento de casos en algunas regiones del país”.

Esta subida se da en 11 provincias de ocho regiones, las cuales tienen un nivel de riesgo alto: Santa (Áncash), Huamanga (Ayacucho), Huancavelica (Huancavelica), Concepción ( Junín), Chepén (La Libertad), Piura, Sullana, Talara (Piura), Tacna (Tacna) y Tumbes, Zarumilla (Tumbes).

¿A qué se debe?

Los nuevos casos se deben a varios factores: la presencia de la variante delta que es causante del 95% de los casos, las aglomeraciones en las ciudades, el mal uso de la mascarilla en el transporte, la apertura de más sectores de esparcimiento y diversión. Otro factor tiene que ver con la información distorsionada que generan los grupos antivacunas, señalan.

Por eso, Tarazona insiste en que se debe reforzar la vacunación con las dos dosis en estas zonas y las brigadas de salud están yendo a hacer cercos epidemiológicos, detectar y rastrear los casos sospechosos.

¿Estamos preparados para una tercera ola? El viceministro señala que si pasamos los 15.000 o 20.000 casos semanales en contagios, el sistema de salud estaría al borde del colapso. “Vamos a tener problemas. A pesar de los enormes esfuerzos que el sector Salud haga, puede ser sobrepasado en su capacidad de respuesta. Por lo tanto, necesitamos que la población se vacune y guarde los cuidados para que no aparezca una ola de gran magnitud”.

Riesgo de la tercera ola

Si la ola crece, el sector invertirá los recursos disponibles para la atención COVID-19. Se haría un traspaso de las camas UCI no covid a covid, e igual se haría con las camas hospitalarias, agrega.

A la fecha se cuenta con 47.400 camas de hospitalización, de las cuales 15.300 son para la COVID-19. “Pero esto es dinámico, si la ola se incrementa inmediatamente se reasignan las camas no covid y podría crecer el número hasta el doble”.

En UCI hay 3.787 camas en total, de las cuales están destinadas 1.815 a los casos COVID-19 y 1.972 para pacientes no covid. “Deberíamos tener más camas UCI, el doble de lo que se cuenta. Si bien ahora tenemos más camas UCI no covid, pero dado al crecimiento podríamos destinar mas camas UCI al área COVID, 2.000 o 2.500″.

Y en cuanto al oxígeno medicinal, se cuenta con 390 plantas, 5.900 concentradores y más de 17.400 balones de oxígeno y se están estableciendo puntos estratégicos de oxígeno en las regiones para evitar desabastecimientos de este recurso. “Si tenemos una tercera ola similar a la segunda, el oxígeno disponible sí nos alcanzaría”.

Por otro lado, en recursos humanos se tiene a 55.000 personas por CAS para atender COVID, y el 70% de este personal se encuentra en el primer nivel de atención. “Con ese número de personas se ha aliviado en algo, pero sigue siendo insuficiente”.

Y ante el riesgo de las fiestas de fin de año, el Minsa lanzó ayer una alerta epidemiológica para la identificación oportuna de casos mediante intervenciones focalizadas. También se hará en establecimientos de salud. Igualmente se planea hacer censos y cuarentena de los contactos, cierre de brechas y ampliar la vacunación. Asimismo, se contempla intensificar la comunicación en relación con el uso de las mascarillas KN95, el autocuidado, entre otras acciones.

Las fiestas de fin de año son una amenaza

Según un análisis elaborado por el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) del Minsa, existe alta probabilidad de incrementar los casos COVID-19 debido al desplazamiento de la población para participar en las reuniones sociales por Navidad y fin de año.

La entidad recomienda reforzar las medidas de prevención y control orientadas a la detección oportuna de casos, su aislamiento y manejo, según grado de afectación, así como la identificación de los contactos y posterior cuarentena de todos ellos. También recomienda acelerar la vacunación.