La conmovedora historia del perrito wachimán que no se separó de su dueño fallecido
En un céntrica calle de Cusco, un indigente dejó de existir, pero fue su fiel amigo el que protagonizó conmovedoras escenas. Durante varios minutos y a base de ladridos, impidió que las autoridades se acerquen al cuerpo de su dueño.
Un perrito, fiel compañero de un adulto mayor en Cusco, protagonizó conmovedoras escenas que se hicieron virales a través de redes sociales.
El desarrollo de esta historia tuvo lugar en la calle Matará. Durante varias horas, un pequeño perro de pelo largo y color beige impedía que extraños, e incluso los policías, se acerquen al cadáver de quien había sido su dueño.
“Le decíamos perrito wachimán; no dejaba que la gente se acerque”, comentó un comerciante de la zona a RRP. El hombre explicó que el can era un celoso cuidador de su propietario cuando aún estaba en vida.
Al conocerse el caso, rápidamente, ciudadanos mostraron su asombro por el hecho, debido a que el can no permitía que se acerquen las autoridades policiales al cuerpo de su dueño.
El perrito alejaba con ladridos al personal policial. Algunos vecinos de la zona contaron que el indigente se asentó en el lugar desde hace tres días y que vendía golosinas.
La zona fue acordonada por la Policía y, tras varios intentos de retirar al animal, una vecina llamada Nancy se acercó. Ella extendió sus manos hacia el perrito y este se dejó abrazar.
La vecina contó a medios locales que adoptará al can y lo llamará Climper. Sostuvo que lo cuidará con amor y le brindará el cuidado especial que necesita, ya que sufrió la pérdida de su dueño. “Hay que darle cariño, calor, hacerle pasar buenos momentos. Me he conmovido con el caso. Seré responsable con su cuidado”, contó.