Sociedad

Represión policial mata a dos jóvenes

Imperdonable. Los cuerpos de las víctimas presentan heridas de proyectiles de armas de fuego a corta distancia. Familiares responsabilizan de los crímenes al gobierno de Manuel Merino. Más de medio centenar de heridos por armas de fuego y asfixia por lacrimógenas.

Dos jóvenes que participaban en las manifestaciones contra el régimen de facto de Manuel Merino perdieron la vida por impactos de proyectiles disparados por las fuerzas del orden. También se han reportado numerosos heridos ingresados en las salas de emergencia de varios hospitales, algunos en estado de gravedad, por heridas de proyectil o asfixia por los gases lacrimógenos, por lo que no se descarta que aumente el número de fallecidos.

El primero caso confirmado fue Jack Pintado Sánchez, de 22 años, quien llegó al Hospital Guillermo Almenara con el siguiente diagnóstico: “Muerte por múltiples orificios en el rostro por proyectil de arma de fuego”.

La confirmación de la muerte de Jack Pintado generó una ola de indignación entre los ciudadanos, que originó un cacerolazo en toda la capital.

A continuación, el presidente encargado del Congreso, Luis Valdez Farías, anunció que a las 8 de la mañana del domingo convocará a Junta de Portavoces para pedirle a Manuel Merino que renuncie y evaluar la fórmula constitucional para sustituirlo, hasta que se elija al nuevo jefe del Estado.

Cuando distintas personalidades comenzaron a exigirle a Merino su dimisión, y algunos de los ministros del gabinete de Flores-Aráoz presentaron sus cartas de renuncia -Patricia Teullet, Fernando D’Alessio, María del Carmen Reparaz, entre otros-, se confirmó la muerte de un segundo manifestante.

Las autoridades del Hospital de Emergencia Grau informaron que la víctima respondía a la identidad de Inti Sotelo Camargo, de 24 años de edad, quien llegó muerto al centro de salud.

Indicaron que el cuerpo de Sotelo presentaba heridas de armas de fuego en el tórax a la altura del corazón.

Luego de reconocer el cuerpo, la madre de Inti Sotelo Camargo gritó de dolor en la puerta del Hospital Emergencia Grau: “¡Mi hijo está muerto, me lo han matado de un balazo en el corazón!”, expresó.

El hermano mayor de Inti Sotelo culpó a Manuel Merino por la muerte y pidió a la población peruana continuar en las calles hasta que renuncie al cargo.

“Mi hermano está muerto, el ministro Gastón Rodríguez dijo que no usarían proyectiles en las marchas y miren qué pasó. Los policías acabaron con la vida de mi hermano. Yo le pido a la población continuar en las calles. Merino de Lama debe renunciar ya”, contó entre lágrimas el hermano.

Manifestantes llegaron hasta el frontis del hospital y gritaban “¡policías asesinos!”, al tiempo que se solidarizaban con los familiares de la víctima.

En ambos casos, las sospechas de los brutales ataques recaen sobre efectivos de la Policía Nacional. Al cierre de edición, el ministro del Interior, general PNP (r) Gastón Rodríguez Limo, no apareció en público. Tampoco informó de nada por los medios y las redes sociales.

Víctimas

Jack Pintado Sánchez

Inti Sotelo Camargo