Sociedad

Padres de niños en hemodiálisis solicitan ser considerados en bonos

El presidente de la Asociación de Padres de Niños con Insuficiencia Renal (APNIR) comentó que algunos pacientes no han podido asistir a sus sesiones de hemodiálisis, pues no cuentan con recursos para movilizarse.

Los pacientes renales también son vulnerables al virus. (Foto: Andina / Referencial)
Los pacientes renales también son vulnerables al virus. (Foto: Andina / Referencial)

Hasta la fecha, en nuestro país la COVID-19 ha afectado a 108.769 personas y cobrado la vida de otras 3.148, de acuerdo a cifras del Ministerio de Salud. Sin embargo, hay cientos de pacientes, con otras enfermedades, cuyas vidas también se han visto alteradas por el virus, como aquellos que sufren de insuficiencia renal y son sometidos a sesiones de hemodiálisis.

Saturnino Espinoza, presidente de la Asociación de Padres de Niños con Insuficiencia Renal (Apnir), ha pedido que sean considerados en los bonos que ha brindado el Estado. ‘‘Hay algunos que sí han recibido, pero la mayoría no. Tenemos muchos casos vulnerables’’, comenta en diálogo con La República.

El hombre cuenta que su hijo, de 15 años, recibe cuatro sesiones de hemodiálisis por semana en el Hospital Cayetano Heredia; sin embargo, debido a que no contaba con recursos económicos, una semana fue solo tres veces y otra incluso llegó a ir dos. Esta situación provocó que el adolescente colapse y el doctor le dijo que no podía faltar a ningún tratamiento.

‘‘Estoy tratando de hacer lo posible para autofinanciarme porque lamentablemente no tenemos recursos’’, indica Espinoza, quien antes vendía algunas cosas, pero ahora, a causa de las restricciones, no es posible que salga de casa.

Él agrega que ir a una sesión implica gastar alrededor de 70 soles en transporte, pues debido a la cuarentena no consigue movilidad con facilidad y esta también es más costosa. ‘‘Gracias a Dios tengo una que otra persona que me apoya, pero al final tengo que reembolsar eso’’, explica.

Espinoza afirma que varios padres de menores en hemodiálisis, así como pacientes adultos, pasan por la misma situación, ya que viven lejos del Hospital Cayetano Heredia.

El abogado Mario Ríos, quien asesora a este grupo vulnerable, señala que ‘‘algunos han logrado ubicarse al lado de sus familiares, pero otros viven en Chosica, Pueblo Libre, no viven al lado del nosocomio’’. Además, varios ni siquiera cuentan con recursos para sus alimentos.