Política

Congresistas a favor y en contra del cuestionado bono de S/9.900

Opciones. Flor Pablo devolverá monto que le asignaron. Otros parlamentarios rechazan medida de la Mesa Directiva.

Una vez más. Mesa Directiva del Congreso entrega bono pese a la poca aceptación popular. Foto: difusión
Una vez más. Mesa Directiva del Congreso entrega bono pese a la poca aceptación popular. Foto: difusión

La asignación del bono de 9.900 soles que dio la Mesa Directiva a los congresistas generó diversas reacciones en el Legislativo. La parlamentaria no agrupada Flor Pablo Medina se mostró en contra de esa bonificación y mediante el oficio 583 rechazó el pago. Informó que devolverá ese depósito.

Sobre el bono, Luis Aragón, de Acción Popular, consideró que “no es prudente ni oportuno debido a la crisis que afecta al país” y recordó que fue un acuerdo de la Mesa Directiva entregar ese dinero a los trabajadores y parlamentarios.

Precisó que en abril se aprobó el bono solo a trabajadores, “pero esta vez lo hicieron también a los congresistas, lo que genera más rechazo de la población hacia el Legislativo”.

Añadió que el tema es irreversible, “pues ya se hizo el depósito, lo que se recomienda a la Mesa Directiva es más criterio y racionalidad a la hora de hacer pagos de esta naturaleza cuando la ciudadanía está pasando muchas carencias con la recesión, inseguridad y efectos de fenómenos climáticos”.

El congresista de Renovación Popular José Cueto se pronunció en contra del bono en medio de la recesión y responsabilizó a la Mesa Directiva por entregar esa bonificación cuando “la mayoría de la gente tiene muchos problemas económicos”.

Edgar Tello, del Bloque Magisterial, salió en defensa del bono señalando “que es un derecho de los trabajadores ganado en su negociación colectiva y la justificación es por las horas extras y compromiso de cumplir sus obligaciones en las gestiones parlamentarias”. Añadió que ese “derecho también debe extenderse a todos los trabajadores del sector público”.

Tulio Vizcarra, secretario general del Sindicato de Trabajadores del Congreso (Sitracon), manifestó que las remuneraciones de los parlamentarios siempre estuvieron al nivel de los ministros de Estado, magistrados de la Corte Suprema, presidente del JNE y otros organismos autónomos.

“No defiendo las remuneraciones de los congresistas, pero entiendo que el bono es para compensar el salario que reciben debido a que está casi por la mitad de lo que ganan los ministros. En el caso de los trabajadores, es por las horas que dedicamos a la labor en el Congreso”, apuntó.

“¿Quién lo fiscaliza?”

Para el politólogo Alonso Cárdenas, de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (UARM), el bono es un contrasentido y una afrenta para la ciudadanía, “porque el Congreso no tiene legitimidad, con una aprobación que está prácticamente en un dígito, es el que más rechazo tiene en América Latina, según el Latinobarómetro, y uno de los más repudiados en el mundo entero”.

Añadió que este tipo de bonos, “dados los antecedentes de los congresistas ‘mochasueldos’ que han quedado en la impunidad, genera mucha suspicacia, pues ¿quién fiscaliza ese dinero? Eso va a contribuir a un mayor desprecio y repudio de la ciudadanía hacia su representación parlamentaria”.

La clave

Apoyo. Para Flor Pablo, el bono sería el intento de obtener apoyo político por beneficios. “Se implementa tras la aprobación de normas de considerable impacto que antes no habían logrado aprobar”, señaló.