El dolor continúa. Han pasado seis meses de la partida del joven fotógrafo Ivo Dutra y su familia sigue reclamando justicia. Él murió en agosto del 2011 al ser atropellado por una couster de la empresa Orión. Ayer, un grupo de amigos y familiares de Ivo se reunieron en el cementerio Jardines de la Paz (La Molina), donde descansan sus restos, e hicieron un llamado a las autoridades para que el proceso por homicidio doloso contra el chofer que lo atropelló, Weimer Huamán, no quede estancado. "Se ha demostrado que ese hombre se pasó la luz roja y que dejó a mi hijo abandonado. Hasta ahora, los dos policías que fueron llamados como testigos porque estuvieron durante el accidente, no quieren declarar", denunció Ana Camargo, madre del fotógrafo.
Edición Impresa - La Republica | Lima - Viernes 22 de Noviembre del 2024