Política

Sunedu en la mira de una comisión del Parlamento con intereses subalternos

Bajo sospecha. Promotores de la investigación contra la entidad tienen claros vínculos con universidades cuestionadas. Comisión nunca debatió informe previo, el cual, sin embargo, se filtró para denunciar al titular de la Sunedu, Martín Benavides.

Por: Fernando Leyton

Los intereses de congresistas con universidades privadas desacreditan el propósito de la Comisión de Educación del Congreso de investigar a la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu). Más aún, refuerzan la percepción de que este sería otro intento de sabotaje contra la reforma universitaria.

Los congresistas de esta comisión no tomaron en cuenta que ya se había investigado a la Sunedu. Fue cuando este grupo de trabajo era presidido por la legisladora exfujimorista Paloma Noceda, en 2017 y 2018. El preinforme de esa pesquisa nunca se puso a debate, pero llegó a la Universidad Telesup, a la que se le denegó la licencia, y se utilizó para denunciar al jefe de Sunedu, Martín Benavides.

“Se supone que solo los congresistas y el personal técnico de la comisión han accedido al documento. Me preocupa quién puede haberlo filtrado para que se utilice como sustento en una denuncia contra el superintendente. Preocupa que pueda haber ese tipo de vínculos del personal de la Comisión o de los mismos congresistas”, expresa Noceda, hoy de Acción Popular.

La legisladora aduce que la situación de entonces es distinta a la actual. “(Sunedu) ha sabido enmendar su rumbo, con resultados concretos que se evidencian con las 80 universidades licenciadas y 13 denegadas”, dice.

Considera que lo adecuado hubiese sido que la comisión debata ese preinforme y decida, a raíz de sus hallazgos, si era oportuno cerrar o ampliar la investigación. “Me parece muy apresurado de parte de la comisión actual que de frente se esté pidiendo hacer una nueva investigación”, enfatizó Noceda.

Excusas y pedidos

Los parlamentarios promotores de la indagación aducen que hay “cuestionamientos de diversos actores de la comunidad educativa”, sin mencionar sus propios vínculos con ellos.

Algunos congresistas han hecho requerimientos a la Sunedu sobre el licenciamiento de universidades privadas, pese a tener intereses en estos centros, según dio cuenta anoche el programa Panorama.

La fujimorista Milagros Salazar solicitó a la Sunedu un informe sobre el licenciamiento de las carreras de enfermería de la Universidad Ricardo Palma, donde estudió y laboró como docente.

La también ‘naranja’ Yeni Vilcatoma conminó a la misma entidad a informarle sobre el proceso de licenciamiento de la Universidad Los Ángeles de Chimbote, porque un abogado tenía problema para colegiarse.

Otro fujimorista, Edwin Vergara, pidió información sobre el proceso de licenciamiento de la Universidad Tecnológica de Los Andes, ubicada en Abancay, por considerar que esta “afronta una problemática social”.

Incluso Tamar Arimborgo, presidenta de la Comisión de Educación, estudió en una universidad no licenciada.

También denuncian “presuntas contrataciones direccionadas” y un supuesto “componente político e ideológico” en las decisiones de la Sunedu.

En tanto, Martín Benavides, titular de la Sunedu, ha dicho que la institución se defenderá “ante cualquier amenaza”.

El excongresista Daniel Mora, impulsor de la Ley Universitaria, advierte un intento de amedrentar a quienes evalúan a las “universidades mediocres”.

La Asociación de Universidades del Perú (ASUP), que ha buscado intervenir en la Sunedu, está a favor de la investigación. En sus filas hay universidades cuestionadas y sin licencia.

La Sunedu ya respondió algunas “sospechas” de la Comisión. Sobre las contrataciones, la entidad espera que a final de año se aplique por completo la Ley de Servicio Civil, con lo que se tendría un manual y un cuadro de perfiles.

En diciembre acaba el proceso de licenciamiento. Algunas universidades podrían cerrar si no acreditan las condiciones básicas de calidad.

De ser así, a los dueños de varias universidades se les acabará el negocio, incluso si eso molesta a sus actuales amigos en el Congreso.

Más datos

- Plazos. Noceda reveló que su sucesora en la presidencia de la Comisión de Educación, Milagros Salazar, vinculada a tres universidades no licenciadas, tuvo encarpetado el preinforme de investigación a la Sunedu durante ocho meses.

- Colaboración. La Sunedu aseguró que responderá todos los pedidos del Congreso. Aclaró que también se “ha atendido personalmente a todos los congresistas que han solicitado reunión”.

1

1