La red de Orellana contaba con 16 jueces y 5 fiscales coimeados. Pertenecían a las jurisdicciones de Lima, Ucayali y Áncash, y sus nombres fueron registrados en “planillas” que manejaba la hermana del cabecilla Rodolfo Orellana, Ludith Orellana. En otros casos fueron identificados por los colaboradores eficaces de la organización criminal.