La hoyada. Madre y hermana de víctimas de los Cabitos 84 lamentan lentitud del sistema de justicia. Han pasado 34 años y aún no hay sanción para los responsables.,Dos estudiantes ayacuchanos secuestrados hace 34 años fueron identificados por peritos del Equipo Forense Especializado del Ministerio Público. Sus cuerpos estaban entre los restos exhumados de la zona conocida como La Hoyada, junto al cuartel Los Cabitos, donde los militares hacían prácticas de tiro. Mediante exámenes de ADN se estableció que se trata de Eloy Barrón Barzola, quien tenía 19 años al momento de su detención, y Amador Amalquino Conga Ataucusi, de 18 años. Ambos fueron sacados de sus casas, ubicadas en el sector Barrios Altos de Huamanga, el 27 de julio de 1984, durante el toque de queda. PUEDES LEER: Complejo Arqueológico de Wari recibirá inversión de S/4.6 millones Sus familiares acudieron a bases militares y destacamentos policiales y, al no tener ninguna información, buscaron en zonas alejadas conocidas como los “botaderos de cadáveres” de Puracuti e Infiernillo, pero no encontraron ningún rastro. Natividad Barzola Prado espera con ansías recibir los restos de su hijo Eloy, para darle sepultura. Pero seguirá firme en su lucha hasta encontrar justicia y reparación. “Por lo menos voy a ver los restos de mi hijo después de tantos años de haber buscado. Voy a llorar recordando el día en que lo arrancaron de mis brazos. Con mis familiares voy a enterrarlo. Pero voy a luchar hasta encontrar justicia”, refiere la anciana que fue testigo del secuestro del joven. Recuerda que a las 2 de la mañana, ocho militares rompieron la puerta de su casa, lo sacaron de su cama y se lo llevaron en un vehículo portatropa. El día anterior, Eloy, quien estudiaba en el colegio, había participado en el desfile escolar por fiestas patrias. “Mi hijo se me acercó y me dijo: 'mamá, no llores, yo soy inocente, me van a soltar y voy a regresar'”, relata doña Natividad. Lo ayudó a vestirse con un pantalón color azul marino, zapatillas blancas talla 42, un polo crema y una chompa. “Vivo en situación de extrema pobreza. Mi hijo hubiera querido mejor condición de vida para mí, ahora cuando me enfermo no hay quien me dé una medicina, cuando esté más anciana no habrá quien me jale de la mano”, dice con lágrimas en los ojos. Operativo militar La misma madrugada se llevaron a Amador Conga, quien también vivía en Barrios Altos. Con 15 años de edad, su hermana Agripina vio que los militares se lo llevaron luego de sacar a Eloy Barrón. “Un carro 4x4 estaba en la puerta de mi casa. Cuatro personas lo agarraron a mi hermano y lo botaron dentro del carro como animal. 'Mañana no más va a volver', diciendo se lo llevaron”, cuenta. Recuerda que el joven vestía un pantalón celeste, un polo, una chompa verde y calzaba chancletas. “Con él nada más vivía. Desde que lo desaparecieron he caminado buscándolo. Yo sabía que lo habían llevado al cuartel. He buscado por todos los lugares, por los huaycos, barrancos, lugares donde botaban cadáveres”, detalla. Mucha veces visitó esos lugares junto a doña Natividad y familiares de otros desaparecidos, donde aparecían cuerpos de personas asesinadas, incluso con huellas de tortura. “Ahora que me van a entregar estaré un poco menos preocupada y afligida por haber encontrado a mi hermano después de tantos años. Voy a recibir el cuerpo con mis familiares y vamos a enterrarlo. Pero vamos a exigir que se haga justicia”, señala. Al igual que Natividad, ella pide al Ministerio Público actuar con celeridad, pues sus casos llevan 34 años esperando justicia. La desaparición de Eloy y de Amador forman parte del expediente que tiene la Fiscalía Penal Supraprovincial de Huancavelica, con sede en Ayacucho, que incluye a varios otros desaparecidos, y que pronto debe ser denunciado ante el Poder Judicial. Ministerio Público denunciará por desaparición y asesinato El fiscal penal supraprovincial de Huancavelica con sede en Ayacucho, Honorio Cassallo Díaz, señaló a La República que la identificación de dos de los restos exhumados en La Hoyada, junto al cuartel Los Cabitos, permitirá a su despacho denunciar a los imputados por los delitos de desaparición forzada y asesinato. “La formalización de la denuncia del caso Cabitos 84 está en camino. Se tiene avanzado al 97%. Estas identificaciones ayudan, toda vez que no solamente se va a formalizar denuncia por desaparición forzada sino por asesinato”, explicó. Asimismo, indicó que la primera semana de junio entregarán estos dos cadáveres a sus familiares, como un acto de restitución para su cristiana sepultura.