Diez ronderos de la comunidad nativa asháninka de Coriri, en el distrito de Pangoa (Junín), fueron detenidos por miembros del Ejército mientras vigilaban en su territorio. Los integrantes de las fuerzas armadas intervinieron a los ronderos para interrogarlos sobre el paradero de terroristas en la zona y procedieron a trasladarlos hasta la base del Comando Especial VRAEM, en el distrito de Pichari (Cusco). Dos de los diez asháninkas detenidos lograron huir del cerco militar y alertaron de lo ocurrido a su comunidad. Ellos narraron que mientras se encontraban patrullando en su territorio debido al hallazgo de huellas de zapatos –que los puso en alerta sobre la presencia de extraños en el lugar– fueron interceptados por los militares y llevados contra su voluntad a Pichari. "El jefe del CE-VRAEM, general Manuel Gómez De La Torre, ha manifestado que está trasladando nuevamente a los asháninkas a Coriri. No sabemos las causas de su detención. El Ejército está cometiendo este tipo de actos dentro de su territorio y esto puede desencadenar en un enfrentamiento", advirtió Irupe Cañari, abogada de la Central Asháninka del río Ene.❧