EE. UU., la ONU y la OTAN piden cese de enfrentamientos entre Armenia y Azerbaiyán
El Departamento de Estado de EE. UU. dijo haber contactado a ambos países para instar al fin de las hostilidades. La ONU y la OTAN piden retomar las negociaciones.
Países como Estados Unidos y entidades como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han solicitado a Armenia y a Azerbaiyán el cese de los enfrentamientos en la región separatista de Nagorno Karabaj, que han dejado al menos 23 fallecidos y más de un centenar de heridos.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, “condena el uso de la fuerza y lamenta la pérdida de vidas y el coste para la población civil”, de acuerdo con un comunicado emitido por su portavoz. El jefe del organismo también pide “el cese inmediato de los combates, una desescalada de la tensión y la vuelta a unas negociaciones sin mayor demora”.
Guterres expresó su respaldo al Grupo de Minsk, mediación liderada por Francia, Rusia y Estados Unidos, y pide a las partes colaborar con dicho bloque “para lograr una reanudación urgente del diálogo sin condiciones previas”.
Por su parte, la OTAN manifestó en una declaración que está “profundamente preocupada” por las informaciones sobre las hostilidades en la región. “No hay solución militar a este conflicto. Las partes deben reanudar las negociaciones para lograr una resolución pacífica”, indicó.
Entretanto, el Departamento de Estado de los Estados Unidos afirmó haber contactado a ambos países para instar “a que cesen las hostilidades de inmediato, a que utilicen los vínculos de comunicación directa existentes entre ellos para evitar una mayor escalada y evitar retóricas y acciones inútiles”.
“Estados Unidos cree que la participación en la escalada de violencia por parte de partes externas sería profundamente inútil y solo exacerbaría las tensiones regionales”, señala el comunicado del país norteamericano, difundido por el portal Infobae.
El presidente ruso, Vladimir Putin, también expresó su preocupación por el conflicto en diálogo con los líderes armenios, según el Kremlin.