Inglaterra: mujer compra lata de frijoles, la abre y encuentra moho [FOTO]
“No puedo entender cómo algo como esto se mete en una lata de frijoles, pero que nadie me responda es mucho más desagradable”, señaló.
En Inglaterra, una mujer, identificada como Leanne Mathieson, le reclamó a un supermercado conocido cuando abrió una lata de frijoles, debido a que tenía moho.
Según informó el portal Daily Mirror, ella compartió las imágenes de su desagradable experiencia que tuvo en sus redes sociales y describió que parecían “intestinos”.
“He enviado un correo electrónico y un mensaje a través de Facebook, pero no he tenido respuesta alguna. No puedo entender cómo algo como esto se mete en una lata de frijoles, pero que nadie me responda es mucho más desagradable, quién sabe cuántos de estos productos también estén contaminados”, manifestó.
Este hecho provocó que la compañía Aldi se disculpe con la afectada por venderle una lata de frijoles vencida. Además, afirmaron que fue un “incidente raro” e indicaron que la putrefacción de esta comida se pudo deber a la exposición al aire.
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Un portavoz del supermercado fue entrevistado por el citado medio y expresó: “Aunque es muy raro, incidentes como este pueden ocurrir ocasionalmente si el embalaje se daña en algún momento antes de que se consuma el producto, ya que el contenido puede estar expuesto al aire”.
Una mujer encontró una ‘cápsula de tiempo’ que guardó hace 30 años cuando era niña
La británica de 36 años Kimberley Colbeck se emocionó hasta las lágrimas tras encontrar unas notas secretas que estaban escondidas en las paredes de su antigua casa, en la localidad de Guiseley, desde 1987, cuando apenas tenía solo tres años.
Los constructores que se encargaron de renovar el edificio hallaron estas ‘cápsulas de tiempo’ perfectamente conservadas durante todos estos años. Colbeck vio una publicación de Facebook sobre el caso y se dio cuenta de que le pertenecían a ella.
“Lloré cuando vi la nota por primera vez”, expresó Kimberley al medio local LeedsLive. La británica dijo que escondió los mensajes junto con sus hermanos Andrew, en ese entonces de 12, y Cristopher, de 8 años.
Kimberley contó que Andrew falleció hace dos años, por lo que el mensaje resultó aún más emotivo debido a que encontró la escritura de su hermano. En 1987, los tres redactaron unas notas y las introdujeron en una botella de vidrio, como una especie de cápsula de tiempo.