EE.UU.: fallece el primer recluso infectado por coronavirus
Las autoridades y expertos en salud consideran a las cárceles como un epicentro potencial para la expansión del COVID-19 en los Estados Unidos.
El primer recluso víctima del coronavirus falleció en un hospital de Luisiana, Estados Unidos, el último sábado, reportaron funcionarios de prisiones federales.
El hombre, cuya identidad se mantiene en reserva, cumplía una condena de 27 años por posesión de drogas en la Institución Federal de Oakdale, cuando comenzó a presentar los síntomas del COVID-19, según informó USA Today.
Las autoridades lo trasladaron a un hospital el 19 de marzo tras presentar tos persistente. Ante los exámenes realizados para descartar el coronavirus, el prisionero de 49 años dio positivo.
EE.UU.: fallece el primer recluso infectado por coronavirus
Al día siguiente de su internamiento, su condición empeoró y los médicos determinaron colocarle un ventilador para ayudarlo a respirar. Sin embargo, su historial médico detalló que el paciente tenía afecciones de salud preexistentes a largo plazo, lo que ocasionó que entre en riesgo. Su deceso fue confirmado por los funcionarios del hospital el sábado por la tarde.
El recluso había estado alojado en las instalaciones de baja seguridad de Oakdale desde abril de 2017. Su muerte se produce pocos días después de que el fiscal general William Barr ordenó a las autoridades penitenciarias federales que comiencen a identificar a los reclusos más ancianos y médicamente comprometidos para su confinamiento en el hogar a fin de evitar un brote mayor del COVID-19 dentro de las 122 instituciones de la agencia.
Representantes de las prisiones federales informaron que 14 reclusos y 13 empleados de la prisión de Oakdale dieron positivo al coronavirus .
Los legisladores y defensores de los derechos civiles han instado al Departamento de Justicia en los últimos días a reducir la cantidad de prisioneros vulnerables que estarían en mayor riesgo de infección dentro del sistema de detención más grande del país.