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“Me desperté y no podía reconocer ni a mis hijos”, ceguera facial casi arruina la vida de exmaestra

Cuando Mary despertó de un coma inducido, que se produjo tras un desmayo, se sentía “como una niña". Al momento, no reconoció con quiénes convivía.

Mry, exmaestra de jardín. Foto: Suministrado.
Mry, exmaestra de jardín. Foto: Suministrado.

La exmaestra de jardín, Mary, de 58 años de edad, vive con prosopagnosia, también conocida como ceguera facial. Esta enfermedad fue resultado de una hemorragia cerebral que sufrió hace 22 años.

La condición significa que no puede reconocer a nadie, incluida su propia familia. De hecho, si sus hijos caminaran hacia ella en medio de la calle, no tendría idea de quiénes son a menos que le hablaran o los reconocieran por sus ropas.

Mary fue diagnosticada con la afección después de que se desmayara en su casa, a los 36 años.

De inmediato, la mujer fue llevada de urgencias al hospital. Seguidamente cayó en coma. Días después despertó sin saber dónde estaba.

Al abrir los ojos, creyó que era una niña y hasta pensaba que sus padres seguían vivos, olvidó su antiguo matrimonio y el divorcio posterior, además de a sus tres hijos.

A pesar de que sus recuerdos volvieron con los años, aún no podía identificar con quién convivía.

Luego de ver una película en Netflix sobre una coreana que pierde la visión y se enamora de un hombre, Mary decidió compartir su historia.

“Recuerdo que había estado sufriendo de una migraña y de repente me desplomé en el piso… resultó que estaba teniendo una hemorragia cerebral ", dijo para The Sun Online.

“Les llevó días descubrir qué había sucedido. Se hicieron una punción lumbar y todo eso, pensando que debí haber contraído algún tipo de virus”, prosiguió.

“Eventualmente tuvieron que ponerme en coma inducido y estuve en ese coma durante bastante tiempo, no recuerdo cuánto”, narró.

Mientras Mary pasó años en un estado de confusión sobre lo que había sucedido, comenzó a leer viejos escritos para tratar de recordar partes de su vida.

Sin embargo, aunque podía reconocer su letra, las fotos eran un asunto completamente diferente, y Mary ni siquiera podía reconocerse en el espejo.

"Me llevó mucho tiempo. Me llevó siete años comprender completamente que no estaba bien ".

Los recuerdos de Mary han regresado en gran medida, todavía le cuesta recordar los años inmediatamente anteriores y posteriores a su colapso.

Según el Departamento de Psicología de la Universidad de Bournemouth, en el Reino Unido, la ceguera facial afectado a alrededor del dos por ciento de la población mundial (alrededor de una de cada 50 personas).