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Ella sufrió la ruptura de su prótesis de seno y empezó a hincharse: “Era como estar embarazada"

IMÁGENES SENSIBLES. Casos como el de Hannah han sido tratados con la remoción de los implantes. Sin embargo, algunas requirieron quimioterapia y hasta radiación.

En Inglaterra (Reino Unido), donde la cirugía estética empieza a alcanzar récords, cientos de mujeres recibieron implantes mamarios defectuosos como Hannah Packham, una madre de 30 años, que pagó cerca de 4 mil dólares para realizarse el procedimiento.

Residente de Brighton y mamá de dos pequeños, Hanna ingresó al quirófano a mediados de 2014 —pasó de la talla 32A a 32D—, pero solo cuatro años después, empezó a sentir que un implante crecía más que el otro.

En diálogo con el diario The Sun del Reino Unido, Hannah Packham explicó que entonces “entró en pánico” al ver que su pecho había “quintuplicado” el tamaño. Incluso temió estar desarrollando cáncer de mama y entró a buscar los síntomas en Google.

No es casualidad. La Organización Mundial de la Salud ha señalado que los implantes de senos están asociados con los Linfomas Anaplásticos de Células Grandes (ALCL) “como una rara célula que se puede desarrollar después” del procedimiento estético.

Por temor o vergüenza, Hannah Packham permaneció en esa situación a lo largo de cuatro meses.

Hannah Packham revela su drama tras someterse a un aumento de senos. Foto: Difusión.

Hannah Packham revela su drama tras someterse a un aumento de senos. Foto: Difusión.

Mientras esperaba que se realizara una operación para extirpar ambos implantes, debió cortar la copa izquierda de sus sostenes para acomodar su hinchado pecho.

Después de que le confirmaron que su implante se había roto, Hannah debió pagar unos 2 mil dólares en una clínica privada local para extraerse las prótesis de emergencia. Fue en abril de 2019.

Hace un mes, sin embargo, volvió con el objetivo de mejorar su apariencia.

“Lo que alguna vez fueron mis pechos perfectos, ahora están deformes".

“Era como si estuviera embarazada de nueve meses. e despertaba y había muchas venas azules”, detalló.

Hannah Packham ha contado su drama para advertir a otras mujeres sobre los peligros de someterse a una cirugía plástica. De todos modos, tuvo suerte.

Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), muchos casos similares han sido tratados con la remoción de los implantes.

Sin embargo, algunas mujeres requirieron quimioterapia y hasta radiación.