Chernobyl: sarcófago que recubrirá zona contaminada por 100 años queda bajo control de Ucrania [VIDEO]
Construcción auxiliar para el reactor número 4 empezó en 2007. Volodímir Zelenski, primer mandatario de Ucrania, inauguró la siguiente fase de la misma.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, recibió oficialmente el nuevo arco que aisla el reactor nuclear número 4 de Chernobyl por parte del Banco de Reconstrucción y Desarrollo Europeo (BERD). “Tenemos que convertir nuestro problema en una ventaja”, dijo en la apertura de la nueva fase de edificación a su cargo.
Aquella zona, foco central de la contaminación radiactiva, explotó el 26 de abril de 1986 y desde entonces la prioridad es erradicar los remanentes del desastre nuclear más grande de la historia, junto al de Fukushima en Japón (2011). “El nuevo arco protector entra en servicio y es entregado a Ucrania”, escribió en su Facebook Antón Úsov, portavoz del BERD.
Zelenski manifestó que ya firmó un decreto a fin de levantar prohibiciones para seguir limitando las acciones de los turistas, como tomar fotos o grabar videos cerca al dispositivo productor de energía. “Tenemos que mostrar Chernobyl al mundo, a los científicos, ecólogos, historiadores y turistas”, señaló el dignatario, quien asumió el poder este año, el 20 de mayo.
“Vamos a transformar la zona de exclusión en uno de los puntos de crecimiento de Ucrania mediante la creación de un pasillo verde”, completó pensando en el sarcófago como una oportunidad de demostrar la unión entre sus compatriotas.
Por su parte, Úsov aseguró que la novedosa construcción se mantendrá durante 100 largos años y desmantelarán el recubrimiento de hormigón —a base de cemento, arena, grava y agua— sobre el reactor número 4.
Años atrás, en 2016, según el BERD, aquella cúpula erigida de prisa debido a la urgencia, que pesa 30 000 toneladas, mide 110 metros de alto y 150 de ancho, había soportado 30 años de inclemencias. “(Es) resultado de una hazaña sorprendente de ingeniería”, destacaron los especialistas.
El sarcófago antiguo fue levantado después del desastre nuclear, pero no con la fortaleza necesaria porque los operarios no podían permanecer tanto tiempo al lado del magma atómico. Si se echa un vistazo por dentro, se pueden identificar 200 toneladas de material radiactivo y fragmentos del armazón que yacen agrietados.