Gastronomía

Descubre cómo son las papas fritas de 200 dólares que están causando furor

Este particular snack puede llegar a costar hasta 200 dólares, ¿pero por qué el precio es tan alto? Conócelo en la siguiente nota.

Este exclusivo snack tiene una pizca de oro comestible de 23 quilates. Foto: World Guiness Records
Este exclusivo snack tiene una pizca de oro comestible de 23 quilates. Foto: World Guiness Records

¡Vas a necesitar un buen presupuesto para estas papas! Y es que el restaurante Serendipity3, ubicado en el Upper East Side de Nueva York, ha regresado al mercado por todo lo alto: batiendo su décimo récord mundial Guinness, esta vez por servir las papas fritas más caras.

¿Cómo son las papas fritas más caras del mundo?

El lujoso snack lleva por nombre ‘Creme de la Creme Pommes Frites’ y cuesta 200 dólares o 734,82 soles, por ración. Sin embargo, este lugar es conocido por sus altos precios. Solo para poner un ejemplo, venden una hamburguesa por 983,93 soles y un helado por 3.345,36 soles.

“Estoy sin palabras, abrumado, eufórico y emocionado. Es una de las experiencias más surrealistas que he visto”, declaró Frederick Schoen-Kiewert, jefe de cocina del establecimiento, al New York Post.

Además de ello, el director creativo Joe Calderone confirmó que realizar este plato fue una consecuencia de su plan de “hacer todo el ruido posible” con esta asombrosa reapertura: “Pensamos que era el momento perfecto para hacer algo realmente divertido y demostrar que Nueva York ha vuelto”.

¿Cómo se preparan las papas fritas más caras del mundo?

Este snack inicia con las papas siendo escaldadas en champán francés. Posteriormente, se fríen dos veces en grasa pura de ganso, para que queden crujientes por fuera y esponjosas por dentro. Luego, se sazonan con sal de trufa de Guerande. Finalmente, se adornan con láminas de queso Pecorino Tartufello y unos toques de trufa negra que también aportan aroma a al plato, coronándolo con una pizca de oro comestible de 23 quilates.

La presentación también es importante y se sirven en un plato de cristal con una orquídea, acompañada con una salsa de queso Mornay, impregnada de trufas. “La trufa es la estrella principal aquí”, asegura el jefe de cocina.