Economía

Adex: se espera recuperación de la producción y exportación de maracuyá en el 2021

Luego de una caída el año pasado. Para recuperar los despachos se trabaja en el ingreso a otros mercados como Corea del Sur, China y Nueva Zelanda.

Maracuyá
Maracuyá

Luego de cerrar el año pasado en rojo, se espera en 2021 la recuperación de la producción y exportación de maracuyá, con el trabajo conjunto del sector público y privado brindando asistencia técnica a los pequeños productores y llegando a otros mercados en el exterior, manifestó el vocero del Grupo de Trabajo de Frutas para la Industria de la Asociación de Exportadores (Adex), Renzo Gómez.

Agregó que para recuperar los despachos se trabaja en el ingreso a otros mercados, entre ellos Asia y Oceanía, principalmente Corea del Sur, China y Nueva Zelanda. “Sus consumidores son innovadores en gustos y sabores, lo que ayudaría a posicionar esta fruta que fácilmente podría convertirse en un superfood”, resaltó Gómez durante la conferencia de prensa del 2° Congreso Internacional de Maracuyá, que organiza el gremio con el apoyo del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA).

Asimismo, detalló que los menores cultivos se dieron porque los pequeños productores usaron semillas de Colombia y Brasil y cosecharon maracuyá con menos grados brix (dulzor), que no es bien recibido por la industria nacional ni en el exterior, lo cual presionó los precios a la baja.

Su productividad en la costa era de 30 toneladas por hectárea en promedio, pero por la mezcla varietal y pobre labor de cultivo se redujo a solo 20 toneladas.

En la conferencia de prensa, Gómez detalló que en 2018 la exportación de maracuyá, en todas su presentaciones, fue por 40 millones 900 mil dólares, lo que representó una caída de 7% respecto al 2017.

Asimismo que el 50% de la producción es en Áncash y La Libertad y que del total nacional el 75% se destina a la agroindustria, principalmente en la producción de néctares, jugos, y hasta jabones.

Generación de empleo

A su turno, el presidente de Adex, Erik Fischer Llanos, resaltó que el potencial de la fruta permitirá diversificar la oferta exportadora peruana. “El reto es desarrollar una variedad de semillas élite que cumpla con los estándares de calidad exigidos en el exterior”, dijo.

Precisó que es muy importante para la agricultura familiar, pues representa un aporte sustancial a su economía debido al corto tiempo de retorno de la inversión (8 meses).

“Nuestro gremio apoya y promueve este tipo de proyectos que en la actualidad generan una fuente de trabajo para alrededor de 3 mil 500 familias que tienen en promedio 2 hectáreas cada una”, puntualizó.