Un reciente video en YouTube reveló unos de los más grandes secretos después del gol de Andrés Iniesta a Holanda, en la final del Mundial 2010.,Corría el minuto 116 de la final entre España y Holanda, cuando un gran pase de Fábregas para Andrés Iniesta marcó el único tanto del partido, con el que el cuadro dirigido por Vicente Del Bosque levantó la Copa Mundial. De aquel entonces, ya pasaron ocho años y recién se pudo conocer un increíble detalle en YouTube. El exBarcelona anota el tanto y todos corren a festejar, a perderse en un abrazo sin fin, que a la postre significó el título mundialista, sin embargo, un jugador de la “Furia Roja” realizó una acción digna del reconocimiento que sirvió para mantener la ventaja. PUEDES VER Andres Iniesta: "Ganar el Mundial será casi imposible" A falta de solo cuatro minutos, este gol los ponía de cara al título, sin embargo, hubo un hombre que pensó en lo que se estaba disputando más, de ir a correr y festejar a lo loca con los demás compañeros. La referencia es para el defensor Carlos Marchena, que si bien, se perdió el mejor momento que un futbolista podría tener, pero que sirvió para que no sea en vano. Las imágenes nos muestran ese momento del increíble disparo de Iniesta, la celebración en honor a Dani Jarque y miles de imágenes que no es necesario ir a la videoteca, porque el momento fue tan especial, que muchos hinchas del fútbol aún lo recuerdan. Sin embargo, una nueva cámara de aquel momento, se reveló recientemente. Se trata de una imagen detrás del arco de Maarten Stekelenburg, el portero holandés, en plano cenital. En ella se ve el gol, abrazo y todo lo que conocemos, pero nos muestra también el heroísmo de Carlos Marchena ante el tanto de Iniesta. Solo hay dos jugadores que no se pierden en aquel abrazo conocido, Iker Casillas que está en el arco y Carlos Marchena que está en el medio del campo. Lo curioso es que este último, fue suplente aquella noche sudafricana, sin embargo, no pensó dos veces para salir corriendo y colocarse en el medio campo para evitar el saque holandés. “Pensaba en que no sacaran. Se me vinieron a la cabeza imágenes de cuando era pequeño. Yo de aquí no me muevo, me decía. Estaban los holandeses, el árbitro y yo. No salgo en ninguna celebración, pero lo que yo pensaba era en que no sacarán”, cuenta el mismo defensa, que por ese momento militaba en el Valencia. En estricto rigor, el rival puede sacar siempre y cuando no haya ningún jugador del contrario en su campo o estén todos fuera de él. Nadie lo hace mientras el otro celebra, pero nunca se sabe y con Marchena, un suplente, dentro de la cancha, Holanda no podía ponerse a jugar. “Fue una reacción que no me esperaba ni yo. Vino por haber jugado mucho en la calle, sin árbitro, sin reglas, de pelearme. Va en mi ADN”, cuenta el defensor, quien no recibió instrucciones, sino que simplemente actúo según lo que le gritó el instinto, incluso contó que no recuerda los le dijo Del Bosque. Cabe resalta que él apenas disputó 8 minutos en todo el torneo, y eso lo convirtió también en un campeón del mundo.