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Apocalipsis zombie, según Amazon: ¿qué dice en la extraña cláusula 42.10?

La compañía Amazon Web Services ha anticipado con este inciso cómo deben usar los usuarios uno de sus software en caso de un ataque masivo de ‘muertos vivientes’.

Desde la adición de este inciso, los usuarios se han preguntado qué sabe Amazon sobre este hipotético escenario. Foto: composición/LR
Desde la adición de este inciso, los usuarios se han preguntado qué sabe Amazon sobre este hipotético escenario. Foto: composición/LR

Amazon, compañía de Jeff Bezos, ha provocado la incertidumbre en los usuarios tras augurar en la cláusula 42.10 de sus términos y condiciones que podría haber un apocalipsis zombie. En este inciso ha resaltado cómo funcionaría uno de sus motores de videojuegos si es que el mundo llegara a ser atacado por ‘muertos vivientes’.

Algunas veces se exhorta a leer las letras pequeñas de los contratos, pero en este caso no hay nada reservado, la información es grande y legible, lo cual ha amplificado la duda en los cibernautas sobre qué sabe Amazon respecto a un posible escenario en el que hombres y mujeres se coman unos a otros. Conoce líneas abajo en qué consiste la cláusula 42.10.

¿De qué trata la cláusula 42.10 de Amazon?

Desde 2016, Amazon ha sorprendido a los usuarios al agregar en sus términos y condiciones un inciso que respaldaría el inicio de un posible apocalipsis zombie. Se trata de la cláusula 42.10. La compañía ha agregado este numeral en este documento para precisar los pasos que deben seguir los clientes en Amazon Lumbeyard, un motor de videojuegos de la nube, en caso de que haya un ataque masivo de muertos vivientes.

“El uso de los materiales de Lumberyard deben cumplir la política de uso aceptable de AWS”, se lee al inicio de la cláusula. Respecto a estos materiales recalcan que “no están diseñados para su uso en sistemas críticos para la vida o para la seguridad, como el uso en el funcionamiento de equipos médicos, sistema de transporte automatizados, vehículos autónomos, control de aeronaves o tráfico aéreo, instalaciones nucleares, naves espaciales tripuladas o uso militar en relación con el combate en vivo”.

Luego, en el mismo párrafo, precisan que “esta restricción no se aplicará en caso de que ocurra una infección generalizada transmitida a través de picaduras o contacto con fluidos corporales que haga que los cadáveres humanos revivan y traten de consumir carne humana viva, sangre, cerebro o tejido nervioso y es probable que conlleve a la caída de la civilización organizada”.