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Cultura Asiática

Lenin Tamayo, creador del Q-pop, llevará las raíces de Perú a toda Asia: “Seré el mensajero”

El cantante, pionero del Q-pop, rescata las raíces andinas peruanas a través de su fusión, la unión de dos mundos, la cual ofrecerá al público asiático en su próxima gira.

La gira de Lenin Tamayo por los países asiáticos arrancará en septiembre de 2024. Foto: Instagram/ lenintamayoqpop
La gira de Lenin Tamayo por los países asiáticos arrancará en septiembre de 2024. Foto: Instagram/ lenintamayoqpop

Lenin Tamayo, el ‘artista visionario’ reconocido por la revista Rolling Stone, se prepara para su gira por Asia, donde llevará la fusión del mundo andino y su pasión por la música coreana, conocida como K-pop. Sin embargo, para lograrlo, pasó por muchos sacrificios y dificultades antes de que sus canciones se viralicen en redes sociales y el mundo voltee a ver su talento. En esta entrevista para La República, el cantante habló sobre el estreno de su nuevo álbum, la reafirmación de su identidad y su emoción por visitar Corea del Sur, Tailandia y Vietnam.

¿Cómo te sientes por la giras que harás por Asia?

— Bueno, es emocionante dar a conocer esta nueva etapa, un paso más en mi carrera, que es esta gira que se está haciendo en estos países de Asia. Es una gira cultural, ya que la perspectiva que vamos a abordar en estos eventos, que se van a realizar en diversas ciudades de estos países, va a ser con la finalidad de promover nuestra cultura. Las emociones son encontradas, mía y de todo el equipo, porque, en general, el Q-pop ha nacido como parte de mi vivencia y tiene mucha influencia del K-pop. Entonces, ir a un país como Corea del Sur, que es la cuna del K-pop, básicamente, con tu quechua, con tu cultura, pues sí, sin lugar a dudas es un acontecimiento muy grande. Porque estamos hablando de un artista que ha emergido de redes sociales y que se ha ido abriendo camino hasta estos lares.

¿Cómo surgió esta oportunidad de llevar tu música a estos países y qué representa para ti? 

— Eso fue trabajo en comunidad. Se están uniendo las embajadas de estos países junto a otras personas clave de estas mismas ciudades donde se van a realizar los eventos. Más que nada, es un trabajo en equipo que se está realizando, por eso, la sorpresa fue grande de parte mía, porque me encontré con todo un equipo de trabajo que está coordinando, de manera remota, entre países como nosotros. Entonces, creo que es una energía, que se está poniendo al proyecto de esta gira, muy especial, porque estamos yendo a, de alguna forma, poder reafirmar lo que ya se ha venido construyendo, que es referente a la resistencia cultural que tenemos y, de alguna forma, desde mi punto de vista, es confirmar la tesis que yo tenía respecto a la cultura andina y la música andina. La música andina es fusión, siempre ha sido fusión. Así yo lo siento y así lo he vivido a través de la carrera de mi madre, que es artista de música andina también. Llegar a estos lugares con tu quechua, con tu sonido andino, pero sin ser ajeno a esta industria o a este sistema de música como el k-pop, a estos mismos países precisamente, pues es confirmar este tipo de tesis referente a nuestra cultura y nuestro valor como sociedad peruana o andina.

Uno de los países donde estarás es la meca del K-pop, ¿qué ofrecerás en estos países asiáticos?

— Cada vez que yo aterrizaba, mis influencias musicales, a mi cultura o a mi sonido, a mi idioma quechua, siempre terminaban agarrando más profundidad por lo que implica cantar música andina y en quechua. Si bien es cierto, me influyo mucho del K-pop, digamos, en la forma de hacer música, hacer el performance, la estética y lo demás que conlleva hacer K-pop, de alguna forma, el hecho de cantar en quechua y revalorizar nuestra identidad, llevarlo a esos países, tiene otro tipo de connotaciones también.

Con mi equipo, estamos preparando presentaciones que cuenten una historia. En este caso, cuenten la historia mía como artista y cómo he ido avanzando en estos dos años, en esta trayectoria, y cómo he ido avanzando con la visión clara, los sueños grandes, pero con dificultades, como cualquiera de nosotros, (los) que queremos emprender algo. Precisamente ese camino está haciendo que más personas descubran mi música y, de alguna forma, me está permitiendo llegar a esos lugares, a esos escenarios. Lo estamos preparando de una manera muy dinámica porque, evidentemente, el idioma podría parecer un inconveniente, pero lo vamos a armar de una manera que cualquier persona, independientemente del idioma, pueda entender, porque para eso tenemos el arte.

 Lenin Tamayo descubrió su vocación por la música cuando participó en un concurso. Foto: Instagram/lenintamayoqpop

Lenin Tamayo descubrió su vocación por la música cuando participó en un concurso. Foto: Instagram/lenintamayoqpop

Respecto a tu respuesta anterior, ¿cuál es esa historia que vas a contar?

— Estamos contando la historia de Amaru, que significa serpiente, como se llama mi último álbum. Amaru es una entidad andina, es parte de la mitología andina, es el dios del mundo oculto, el mundo interno, y es un mensajero entre el mundo interior, el ucupacha, y el mundo celestial, el hananpacha. Siento que mi música es eso, que yo soy un mensajero entre dos mundos que pueden parecer distantes, como el mundo de la música andina y el mundo del K-pop, pero que al tratar de llevar este mensaje en viceversa, estoy sirviendo de puente para unir generaciones, para unir a los padres que tal vez no conocen mucho del K-pop, pero sus hijos sí, pero los hijos no conocen mucho de la cultura andina, pero los padres tal vez sí. A través de mi música, estoy uniendo generaciones, estoy reafirmando identidades y, de alguna forma, tratando de reivindicar nuestra cultura.

Cuéntanos cómo ha sido la recepción de los fans extranjeros respecto a tu música

— He viajado a Colombia, a Chile y he viajado un montón dentro del país. Creo que como seres humanos, tal vez compartimos una raíz común, puedo entender que todos nosotros tenemos este arraigo a nuestra tierra. Esta necesidad, de alguna forma, (una) necesidad de querer apegarnos a nuestras raíces o abrazar lo nuestro. Cuando fui a Chile y me encontré con fans, seguidores o gente que estaba descubriendo mi música, vi en ellos esa emoción y esa esperanza de poder sentir que, a través de la música, podemos unirnos, independientemente de las barreras geopolíticas o geográficas. La cultura, el arte, la música andina no conocen de fronteras.

¿Cómo han sido tus inicios en la música y cómo lo enfrentaste?

— Si te contara. Ese ha sido un camino muy largo, sigue siendo largo, pero me he acostumbrado a correr bastante, pero, sin lugar a duda, fue un camino. Es como ver la cima y verla inalcanzable, pero tener la energía o la esperanza de que vas a llegar y no detenerte, por más de que estés cansado; y es lo que he hecho.

Desde el simple hecho de grabar comerciales o ver mi cara en publicidad de calle, en televisión, pero al mismo tiempo llegas a tu casa y te encuentras con problemas, como cualquier otro que emprende, que invierte, que tiene que hacer esto, que tiene que hacer lo otro, que tal vez los pagos no se hacen automáticamente, entonces este mundo, que puede ser muy de contrastes, es el cual he vivido en estos dos años. Cuando alguien es famoso, está empezando a ser famoso entre comillas, pues es un choque, pero, afortunadamente, en mi caso, mi madre ha sido, pues, como una escuela. A  través de ella, he visto cómo el artista peruano tiene que emerger, cómo tiene que gestionar sus recursos y, de alguna forma, ya he venido curtido con eso, pero es indudable no chocarme con eso en la realidad. Como experiencia personal, es distinto, por las redes sociales, que al inicio te dan comentarios positivos, pero también negativos.

He sacrificado muchas cosas, digamos, personales, que lo hago con mucho gusto, pero lo he hecho en este momento de mi vida, porque considero que tengo que meterle, de alguna forma, todo este enfoque a lo que estoy haciendo, porque siento, y quiero pensar que es así, que lo que estoy haciendo, más allá de la música o de la pretensión, pues, es un primer paso, que se abre un camino, para que los artistas jóvenes que vengan después tengan un precedente. 

 Lenin Tamayo se presentará el 31 de mayo en el Teatro Municipal del Cuzco. Foto: Instagram/lenintamayoqpop

Lenin Tamayo se presentará el 31 de mayo en el Teatro Municipal del Cuzco. Foto: Instagram/lenintamayoqpop

A parte de la gira por Asia, ¿cuáles son tus proyectos en el futuro? 

— Bueno, lo que puedo comentar, así públicamente, tal vez, es que se está haciendo la segunda parte del álbum, el cual está dividido en tres partes, la segunda parte está en proceso de producción, son detalles mínimos, pero ya las canciones están casi avanzadas en su totalidad. Esta segunda parte es el kaipacha, que es el mundo terrestre en la mitología andina y, pues, en esta segunda parte del álbum, mis mensajes ya no van a ser tan simbólicos como en la parte anterior, va a ser mucho más declarativo, mucho más específico, mucho más, de alguna forma, evidente en las canciones, en los videos. También hay otras cosas que, tal vez, no puedo comentar a grandes rasgos, pero, de alguna forma, son decisiones que estoy tomando, que son muy importantes.

El álbum, en general, pues, va a ser una forma de reafirmar mi identidad, el lugar que me vio nacer básicamente, de manera literal y artísticamente, para poder sentir que estoy haciendo, no sé si el término es patria, pero sentir que estoy haciendo una comunidad con mi gente y, de esa forma, los siguientes pasos que vaya a hacer en mi carrera se sientan con peso. 

¿Tú te imaginas de aquí a dónde quieres llegar, dónde te visionas como cantante?

— Estoy esperando que las cosas se coloquen en su lugar, porque, en estos meses, he estado en reuniones o me han ocurrido oportunidades muy grandes que jamás hubiera pensado que pudieran hacerse realidad, como la gira o como otras cosas más que se van a anunciar. Entonces, ha llegado un punto en mi carrera en el cual he sentido todo tan surreal, que, de ningún modo, podía procesarlo, entonces lo que decidí hacer fue aferrarme a mi esencia, que en este caso es el artista, y meterme en el estudio o tratar de enfocarme solo en el arte, dejar que las cosas se acomoden en su lugar, hasta tal punto de que, por ejemplo, cuando hubo esta mención de la revista Rolling Stone, me tomó como 3 o 4 días asumir lo que había pasado; mi madre me lo dio, me lo dijo, me lo hizo ver y yo lo vi, y seguí escribiendo letras, me di cuenta de lo importante cuando ya vi que todos los medios aquí estaban rebotándolo y cuando colegas de mi madre, maestros de la música andina, me llamaron para felicitarme, ahí fue donde me fui dando cuenta de lo importante que era ese acontecimiento.

Emprender, sobre todo en países como el nuestro, en el cual los sueños son tan grandes, pero a veces las oportunidades no son tantas, y nos encontramos con tantas dificultades para hacer, pero eso nunca ha sido excusa, y eso básicamente es lo que más me inspira a poder seguir haciendo mi arte, y que se haga más pop.

Bachiller en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Nacional Federico Villarreal. Con experiencia en redactora web en temas de actualidad y entretenimiento. Ahora en la sección de cines y series en La República.