La ciencia celebra el regreso de una especie de ave que se creía extinta: volvió a reproducirse después de 40 años
Este asombroso regreso resalta los avances en los esfuerzos de preservación y ofrece una esperanza renovada para otras especies en peligro de desaparición.
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Una especie considerada extinta en estado salvaje desde hace más de 40 años ha logrado reproducirse en un entorno natural, lo que marca un avance significativo en los esfuerzos de conservación. El martín pescador de Guam ha puesto huevos en el atolón Palmyra, un santuario ecológico libre de depredadores.
Este acontecimiento, anunciado por la Sociedad Zoológica de Londres (ZSL) y The Nature Conservancy, representa un rayo de esperanza para la comunidad científica. La especie, que había visto su población colapsar en las décadas de 1970 y 1980, ha encontrado un nuevo hogar donde puede prosperar.
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La historia de esta ave es un recordatorio de los desafíos que enfrentan muchas especies en peligro de extinción. Sin embargo, la reciente reproducción en estado salvaje sugiere que, con los esfuerzos adecuados, es posible revertir el daño que la intervención humana ha causado.
Un ecosistema devastado y la lucha por la supervivencia
Originario de la isla de Guam, el martín pescador de Guam (Todiramphus cinnamominus) sufrió una drástica disminución de su población debido a la introducción de la serpiente arbórea marrón (Boiga irregularis), un depredador que eliminó gran parte de la fauna local. Ante el riesgo de extinción total, 29 ejemplares fueron rescatados y trasladados a zoológicos en Estados Unidos, donde permanecieron bajo cuidado humano durante décadas.
A pesar de los esfuerzos por reintroducir la especie en su hábitat natural, los intentos resultaron infructuosos debido a la persistencia del depredador invasor. La solución llegó con la identificación del atolón Palmyra, un territorio libre de depredadores y bajo estricta protección ambiental, como un lugar ideal para la reintroducción.

En abril de 2025, se anunció que tres de las parejas formadas habían construido nidos y puesto huevos en estado salvaje, marcando la primera reproducción natural de la especie en casi 40 años. Foto: El Español
Un nuevo comienzo en el atolón Palmyra
En 2023, un grupo de nueve aves (cinco machos y cuatro hembras) fue liberado en el atolón. En pocos meses, los martines pescadores se adaptaron al entorno, comenzaron a alimentarse por sí mismos y establecieron territorios. En un giro inesperado, formaron parejas reproductivas y construyeron nidos, lo que llevó al equipo liderado por el profesor John Ewen a confirmar la puesta de huevos.
“El nacimiento de una nueva generación en libertad es un logro monumental”, afirmó Ewen, quien destacó la culminación de décadas de trabajo de conservacionistas y biólogos. Aunque la especie sigue catalogada como “extinta en estado salvaje” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), este avance podría sentar las bases para una futura reclasificación.
Un símbolo de esperanza en la conservación
El regreso a la vida de este animal silvestre no solo representa un triunfo para esta especie, sino que también plantea preguntas sobre los modelos de conservación en el futuro. ¿Es posible restaurar especies desaparecidas si se recrean hábitats adecuados? El caso del martín pescador sugiere que sí y ofrece un rayo de esperanza en tiempos de pérdida masiva de biodiversidad. Este logro resalta la importancia de la colaboración entre organizaciones y científicos en la lucha por la conservación de especies en peligro.
















