Científicos identifican un microcontinente 'no nacido' que se esconde debajo de Groenlandia y Canadá
Un equipo de geólogos analizó en un estudio el estrecho de Davis, ubicado entre Groenlandia y Canadá. Se determinó que su corteza está compuesta de un continente que no se desgarró en su totalidad cuando la Tierra se dividía.
Desde tiempos antiguos, la Tierra está en constante movimiento. Producto de ello, hay una grieta de 3.500 kilómetros denominada Rift de África Oriental, desgarro observado desde hace seis años. Ahora se asoma a nosotros otro evento geológico: se ha descubierto un microcontinente 'fallido', el cual se generó como consecuencia de la intensa actividad de la corteza planetaria.
Este microcontinente 'no nacido' se ubica entre las fronteras de Canadá y Groenlandia. Mediante procesos computarizados, los científicos han logrado modelar las placas involucradas en el pasado.
Microcontinente descubierto entre Canadá y Groenlandia abre nuevos cuestionamientos
En América del Norte, específicamente entre Canadá y Groenlandia, científicos de Suecia y el Reino Unido han encontrado un microcontinente 'no nacido'. A su vez, los mismos investigadores creen que se toparon con una vetusta falla parecida a la de San Andrés, en California, Estados Unidos, la cual pudo haber guiado el movimiento de separación terrestre parcial entre ambos sectores desde hace 60 millones de años.
El estrecho de Davis es el que separa ambas masas continentales y tiene una anchura de entre 320 y 640 kilómetros, además de que conecta el mar de Labrador con la bahía de Baffin. Este estudio determinó que su corteza se trata en realidad del fragmento de un continente que no se separó completamente cuando Groenlandia y Canadá se dividieron.
Los microcontinentes, según los expertos, se definen como fragmentos aislados de corteza continental fracturada y litosfera, "desplazados de su continente original y rodeados por corteza oceánica". Los resultados se pueden leer en la revista Gondwana Research.
El estrecho de Davis es famoso por sus mareas feroces. Foto: iStock
Hace unos 33 millones de años, Groenlandia dejó de distanciarse de América del Norte y permaneció en la placa tectónica norteamericana. Esta zona de ruptura fallida es un punto de interés para estudiar el movimiento y la división de las placas tectónicas, según Jordan Phethean, geofísico de la Universidad de Derby en el Reino Unido y coautor del estudio.
Los investigadores han denominado protomicrocontinente al nuevo fragmento de corteza continental descubierto bajo el estrecho de Davis. Algunos, como Madagascar, forman sus propias islas. En el caso del estrecho de Davis, este no se desprendió del todo. Es un segmento de corteza continental de entre 19 y 24 kilómetros de grosor, explicó Phethean.
El trabajo científico para investigar el microcontinente
Los investigadores reconstruyeron la estructura subterránea de la región del estrecho de Davis utilizando datos de gravedad recopilados por satélites e información sísmica obtenida por barcos. Con estas pistas, los científicos construyeron modelos informáticos del movimiento de las placas en el pasado.
América del Norte y Groenlandia comenzaron a separarse hace 120 millones de años y el proceso se aceleró hace 61 millones de años, cuando el fondo marino del estrecho de Davis comenzó a expandirse.
En ese momento, Groenlandia podría haber generado una falla similar a la de San Andrés, en los Estados Unidos, California, llamada Margen Transformante Pre-Ungava. Hace unos 56 millones de años, Groenlandia llegó al final de esa estructura y se fue hacia el norte. El protomicrocontinente del estrecho de Davis se formó durante este período.
La falla de San Andrés discurre unos 1.300 km a lo largo de California, Estados Unidos. Foto: United States Geological Survey
La placa norteamericana iba a romperse, pero hace unos 48 millones de años el proceso paró. Se formó una nueva falla importante en la región y la ruptura en el estrecho de Davis culminó. Poco después, hace unos 33 millones de años, Groenlandia tuvo un choque contra la isla de Ellesmere y ello habría frenado su desplazamiento.
A menudo, se suele pensar que la tectónica de placas se manifiesta desde las entrañas de la Tierra, como el hundimiento de placas oceánicas bajo los continentes. La importancia de la falla recién descubierta en el estrecho de Davis sugiere que las características de la corteza superior también pueden marcar influencias, comunicó Phethean.