El ‘Reloj del fin del mundo’ se mantiene a 100 segundos del apocalipsis
El reloj simboliza el cataclismo del planeta. Cada año, un grupo de científicos avanza, retrocede o mantiene sus manecillas para advertir a la humanidad la situación en la que se encuentra.
El ‘Reloj del fin del mundo’ mantuvo este año sus manecillas a solo 100 segundos de la catástrofe planetaria. La ONG Boletín de Científicos Atómicos, que maneja el instrumento —una simbolización de la inminencia de un cataclismo—, sugirió nuevamente que la humanidad se encuentra cerca de su fin.
En 2020, los científicos avanzaron las manecillas del reloj 20 segundos y así lo fijaron al tiempo de este año. Los expertos creen que la pandemia y la ineficacia de los Gobiernos, así como su falta de preparación ante otras amenazas han provocado que el mundo esté a puertas de un apocalipsis.
“La mortal y aterradora pandemia de COVID-19 sirve como una llamada de atención histórica, un claro ejemplo de que los Gobiernos nacionales y las organizaciones internacionales están mal preparados para hacer frente a las amenazas de las armas nucleares y el cambio climático que realmente podrían acabar con la civilización”, dijo Rachel Bronson, directora de la organización.
El ‘Reloj del fin de mundo’ fue creado en 1947 por la ONG para advertir sobre un cataclismo nuclear. La hora del año pasado y de este 2021 representan una histórica marca, incluso superior a la Guerra Fría.
“‘¡Despiértense!”, pidió Jerry Brown, exgobernador de California y presidente de la ONG, a los presidentes de países desarrollados.
“Estados Unidos, Rusia y las potencias nucleares del mundo deben dejar de gritarse entre sí. Es hora de eliminar las armas nucleares, no de construir más. Lo mismo ocurre con el cambio climático. Estados Unidos, China y otros países importantes deben abordar seriamente las emisiones mortales de carbono”, refirió.
Como sucede con frecuencia, luego de que un grupo de expertos compuesto por 13 nobeles marque la nueva hora cada año, la ONG fue acusada de alarmista. Bronson resaltó que es consciente de que la COVID-19 no eliminará a la humanidad, pero advirtió que es un claro ejemplo de que las autoridades no pueden afrontar amenazas de este tipo.
El reloj cumple 75 años y desde su creación ha intentado advertir todo tipo de peligros para la humanidad, como el bioterrorismo, la contaminación y el surgimiento de virus.