La NASA descubre agua en el lado visible de la Luna
La agencia espacial indica que el agua presente en la superficie lunar podría ser usada por los astronautas en las futuras misiones.
La NASA anunció que el Observatorio Estratosférico de Astronomía Infrarroja (SOFIA) ha detectado agua congelada en la superficie de la Luna visible desde la Tierra. “Este descubrimiento indica que el agua puede estar distribuida por la superficie lunar, y no se limita a lugares fríos y sombreados”, indicó la agencia espacial, en referencia a que antes solo se había hallado este compuesto en profundos cráteres que no recibían luz solar alrededor de los polos lunares.
SOFIA detectó moléculas de agua (H2O) en el cráter Clavius, uno de los cráteres más grandes que se pueden ver desde la Tierra, ubicado en el hemisferio sur de la Luna. Las observaciones anteriores de la superficie lunar detectaron alguna forma de hidrógeno, pero no pudieron distinguir entre el agua (H2O) y el hidroxilo (OH).
“Los datos de esta ubicación revelan agua en concentraciones de 100 a 412 partes por millón, aproximadamente equivalente a una botella de agua de 12 onzas, atrapada en un metro cúbico de suelo esparcido por la superficie lunar”, señala la NASA. El hallazgo está detallado en un reciente estudio publicado en Nature.
“Teníamos indicios de que H2O, el agua familiar que conocemos, podría estar presente en el lado iluminado de la Luna. Ahora sabemos que está ahí. Este descubrimiento desafía nuestra comprensión de la superficie lunar y plantea preguntas intrigantes sobre los recursos relevantes para la exploración del espacio profundo", dijo Paul Hertz, director de la División de Astrofísica en la Dirección de Misiones Científicas en la sede de la NASA en Washington.
De acuerdo con las declaraciones de los científicos en teleconferencia de prensa, el agua presente podría ser suficiente para su uso por parte de los astronautas en las misiones tripuladas que comenzarán en 2024 mediante el programa Artemisa.
El descubrimiento fue posible gracias a SOFIA, un avión Boeing 747 modificado para llevar un gran telescopio a 11 kilómetros de la superficie terrestre. “Al volar por encima del 99% del vapor de agua de la atmósfera (de la Tierra), SOFIA observa en longitudes de onda infrarrojas y puede detectar fenómenos imposibles de observar con luz visible”, explicó la NASA.
Representación del hallazgo de agua desde SOFIA. Foto: NASA
En otro estudio cuyos resultados también se publican hoy, los científicos buscaron áreas en sombra permanente con ayuda de los datos del Orbitador de Reconocimiento Lunar (LRO). Estos lugares son conocidos como trampas frías, donde el agua podría quedar capturada de manera permanente.
Los autores de la investigación hallaron estas trampas frías en ambos polos y concluyeron que están distribuidas hasta en 40.000 kilómetros cuadrados de la superficie lunar. En ese sentido, sugieren que “el agua atrapada en los polos lunares puede estar más ampliamente distribuida y accesible como recurso para misiones futuras de lo que se pensaba anteriormente”.