Científicos trabajan en una mascarilla que desactivará el coronavirus por contacto
Investigadores en todo el mundo se han volcado en hallar la vacuna contra la COVID-19. Otros buscan, sin descanso, la manera más óptima de desinfectar las gotitas respiratorias que puedan tocar el material de la mascarilla.
La enfermedad COVID-19, que ha afectado a millones de personas en el mundo, no deja de ser investigada. Por tal motivo, se han generado numerosos estudios científicos en torno al nuevo virus y la mayoría tienen como propósito contener la pandemia.
Investigadores de la Northwestern University, en Illinois han empezado a desarrollar un nuevo tipo de mascarilla que sea capaz de desactivar el coronavirus por simple contacto.
La interesante propuesta acaba de obtener un financiamiento e la National Science Foundation (NSF) de Estados Unidos a través de su programa de respuesta rápida RAPID.
mascarilla higiénica.
"La propagación de enfermedades respiratorias infecciosas como COVID-19 comienza generalmente cuando al toser o estornudar alguien libera gotas respiratorias cargadas con el virus, explicó Jiaxing Huang, profesor de Ciencia de los Materiales que además dirige la investigación.
El propósito del uso de las mascarillas en estos tiempos es evitar que el virus se propague. “Necesitamos reducir en gran medida la actividad del virus que hay en esas gotitas respiratorias recién liberadas”, detalló.
Según ABC, los científicos se encuentran trabajando sin descanso para hallar las mejores soluciones que sean aplicadas y que beneficien a la sociedad.
Cómo funcionará la mascarilla
El equipo de investigadores busca aprobar productos químicos antivirales que se puedan incorporar, de forma segura, a una mascarilla para desinfectar así las gotitas respiratorias a medida que pasan.
En la actualidad, las mascarillas o tapabocas que están disponibles en el mercado solo proporcionan barreras físicas, que reducen el número de nuevas gotas que podrían convertirse en fuentes de infección cuando son liberadas.
El equipo de trabajo tiene el objetivo de idear una solución integrada, que funcione en las mascarillas actuales para lograr desactivar el virus.
Advierten que lograr los objetivos ayudaría a reducir el nivel de virus en las gotas exhaladas por pacientes positivos a la COVID-19.
Los principales beneficiarios con ese tipo de mascarillas serían los trabajadores de salud (médicos, enfermeras, etc.) y todos quienes les rodean.