En los primeros días de diciembre del 2021, se estrenó la nueva temporada de Call of Duty: Warzone. La actualización incorporó, entre diversas novedades, nuevos ítems cosméticos que los usuarios pueden desbloquear con el Battle Pass. Para mala fortuna, uno de los skins causó gran controversia por brindar una inesperada ventaja competitiva.
En este caso, el skin Awoken del personaje operador Francis permitía que los jugadores fueran casi invisibles en ciertas distancias: un bug. Como desbloquear el aspecto en cuestión solo es posible al comprar el Pase de Batalla, muchos jugadores afirmaron que el Battle Royale se convirtió en un molesto pay-to-win (pagar para ganar, traducido al español).
Además, pese a los constantes reportes, la problemática seguía siendo un dolor de cabeza hasta inicios de enero. Por ello, tras finalizar el periodo vacacional de los trabajadores de Raven Software, ese y otros errores fueron corregidos.
En la última actualización para el battle royale, la desarrolladora de videojuegos solucionó una serie de problemas que afectaban la experiencia desde hace algunas semanas. De ese modo, el bug del skin Awoken del operador Francis fue una de las cuestiones que se atendieron con prioridad.
Adicionalmente, el reciente parche también abordó problemas de colisión y un error que ocasionaba que las cajas de botín cayeran en las mismas coordenadas. Según comenta la empresa, la justificación por la que estos bugs sobrevivieron tanto tiempo es porque se encontraban de vacaciones.
“¡Feliz 2022! Estamos emocionados de volver al trabajo. Esta es la primera de muchas actualizaciones en las que trabajaremos durante las próximas semanas”, indicaron desde la compañía en su cuenta de Twitter.
Call of Duty: Warzone está disponible para PC, Xbox One, Xbox Series X|S, PS4 y PS5.