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Lo último que se muestra de frases de Santa Rosa de Lima

Si eres de los que dedica frases y oraciones de la Patrona de América, aquí te compartimos las mejores.

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El día 30 de agosto será feriado nacional por el Día de Santa Rosa de Lima. Foto: composición LR/ Andina

Santa Rosa de Lima es la patrona de América y de las Filipinas. Cada 30 de agosto, la población peruana, sobre todo quienes practican la religión católica, y en ciertos países del extranjero, conmemoran a Isabel Flores de Oliva, mejor conocida como Santa Rosa de Lima. Su noble corazón, su solidaridad y obras en apoyo a los más necesitados trascendieron hasta ser canonizada.

Ella también es denominada como la ‘Patrona de Lima, del Nuevo Mundo y las Filipinas’. Repasa aquí las mejores frases, dichos, mensajes y plegarias para celebrar este 30 de agosto el Día de Santa Rosa de Lima.

Los peruanos se alistan para elevar plegarias a Santa Rosa de Lima. Foto: John Reyes / La República

Las mejores frases por el Día de Santa Rosa de Lima

  • “El amor es duro, pero es nuestra esencia. Eso es lo que nos eleva por encima del resto de las criaturas”
  • “Cuando servimos a los pobres y a los enfermos, servimos a Jesús. No debemos dejar de ayudar a nuestros vecinos, porque en ellos servimos a Jesús”
  • “Aparte de la cruz, no hay otra escalera por la que podamos llegar al cielo”
  • “El don de la gracia aumenta a medida que la lucha aumenta”
  • “Conozcan todos que la gracia sigue a la tribulación. Sepan que sin el peso de las aflicciones no se llega al colmo de la gracia” (Frases citadas en el Elpaisano.pe).

Día de Santa Rosa de Lima: oraciones y mensajes

  • “Gloriosa Santa Rosa de Lima, tú que supiste lo que es amar a Jesús con un corazón tan fino y generoso enséñanos tus grandes virtudes para que, siguiendo tu ejemplo, podamos gozar de tu protección en la tierra y de tu compañía en el cielo. Amén”
  • “Oh, Dios Omnipotente, dador de todo bien, que hiciste florecer en América por la gloria de la virginidad y paciencia a la bienaventurada Rosa, prevenida con el rocío de tu gracia; haz que nosotros, atraídos por el olor de su suavidad, merezcamos ser buen olor de Cristo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén”
  • Santa Rosa, ‘Rosa y Reina del Perú', encendida en el amor a Dios y a la fe, te apartaste del mundo y te entregaste a Cristo en medio de admirables penitencias. Quisiste ser apóstol y llevar a todos los hombres hacia Jesús. Para ello renunciaste a tu hermosura y a tus atractivos humanos, mortificando tu cuerpo (...). Alcánzanos el camino de la verdadera vida para que lleguemos a gozar un día de los bienes eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén” (Oraciones brindadas por Aciprensa.com).

¿Cómo murió Santa Rosa de Lima?

Santa Rosa de Lima murió, tal y como lo había profetizado, un 24 de agosto de 1671 por la mañana. El mismo día de la fiesta de San Bartolomé. Los últimos tres meses de su vida la pasó enferma de tuberculosis, lo cual la llevó a una situación

Se quedó en este tiempo en la casa de Gonzalo de la Maza, un contador notable del gobierno virreinal, y de su esposa María de Uzategui. Por ello, en ese lugar se levantó el Monasterio de Santa Rosa de Lima.

Actualmente, sus restos se veneran en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Lima, con notable devoción de los pobladores y también llegan a visitarla de distintas partes de América. Del mismo modo, existe una Capilla dedicada a su culto en el Crucero del Templo dominicano.

¿Cómo surgió la historia del Pozo de los Deseos?

Quizás una de las tradiciones más clásicas del 30 de agosto es escribir y dejar caer en lo profundo del pozo las cartas. Sin embargo, muy poco se habla sobre el porqué de esta costumbre. Para ello debemos remontarnos a la época de los años 1600, cuando esta santa cumplía rigurosas penitencias como acto de sacrificio por los pecados de las personas. Una de ellas consistía en colocarse a la altura de la cintura un silicio, el cual aseguró con un candado y tiró la llave al pozo para así no poder sacárselo.

Es así que luego de varios días de tener el cinturón de púas hincando su piel, sus allegados le pidieron que lo quite, pero ella se negó y se fue hacia el pozo a llorar. Es ahí que, tras sus súplicas, Dios se le habría acercado y milagrosamente la cadena se abrió. Por ello, los años siguientes de su fallecimiento, sus seguidores comenzaron a escribir cartas expresando sus deseos y necesidades espirituales y materiales, colocándolas dentro del pozo.