En estos días, son muchos los teléfonos inteligentes modernos que se fabrican con resistencia al agua. Sin embargo, a raíz de esa característica hay usuarios que se confían y no temen en exponer sus equipos a la presencia de líquidos e incluso los sumergen para probar sus capacidades. Además, en ocasiones puede pasar que el cable del cargador se moja y, a pesar de ello, uno lo conecta a su teléfono. ¿Qué puede pasar si lo haces sin secarlo correctamente? En esta nota te contamos las posibles consecuencias.
Antes de comenzar, debes saber que la denominada clasificación IP hace referencia al nivel de agua que un equipo podrá resistir. Así, mientras más alta sea la resistencia, más elevado será la IP. Por ejemplo, estos son algunos de los tipos que encontrarás y a qué intensidades de líquidos pueden estar expuestos:
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Como tal, puede darse la ocasión de que tu cable USB-C o el lightning se mojen y no te has dado cuenta de ello y lo conectas a tu smartphone. Al hacerlo, puedes ocasionar un cortocircuito en los componentes internos, al mezclar agua con electricidad y tu equipo se va a malograr.
Del mismo modo, si no se llega a malograr el celular, lo que va a pasar es que la carga se pondrá muy lenta e incluso es probable que el propio sistema operativo te notifique de ello y te pida "secar el la entrada del cable y volver a insertarlo".
En todo caso, siempre es recomendable evitar que tu teléfono inteligente quede expuesto a cualquier tipo de líquidos, en especial si solo tiene resistencia al agua y no está "a prueba de" ello.