Si tienes alrededor de 30 años, las chances de que hayas usado alguna vez Windows 95 en su momento son altas. Y eso no es para nada una experiencia menor. Debes saber que, con dicho sistema, Microsoft por fin se consolidó en la cima de la preferencia de usuarios que deseaban adquirir una PC para los hogares, gracias a la interfaz gráfica que por fin llegaba en una plataforma que estaba lista para quedarse. Todo tenía que salir perfecto para Bill Gates, y es por eso que no escatimó sobre ningún detalle, incluido el simple sonido introductorio de apenas 7 segundos, por el que desembolsó miles de dólares.
Si no recuerdas de qué estamos hablando, debe ser porque, desde Windows 95 en adelante, los sonidos introductorios de cada sistema operativo han tomado una importancia significativa. Aquí te dejamos el clip del que te hablaremos a continuación.
¿Te trae recuerdos? Pues bien, este pequeño audio tiene muchas más anécdotas detrás de lo que la mayoría piensa, pero uno de los detalles más impresionantes de su historia es a quién eligieron para crearlo, qué le dijo Microsoft que cree y cuánto le pagaron. Te contamos todos los detalles.
Este sistema iba a ser el esperado sucesor directo de Windows 3.1, la primera versión de Windows que había logrado cierta fama, especialmente en los círculos empresariales, que comenzaron a adoptarlo por sus capacidades de redes para grupos de trabajo.
La idea con Windows 95 era por fin presentar un OS listo para usarse en las áreas domésticas, con una increíble facilidad de uso no vista en Windows hasta entonces, con capacidades multimedia de fábrica y con una gran compatibilidad entre dispositivos.
El mercado para Microsoft fue claro y a lo que querían relacionarse en ese entonces era el futuro. Por ello, buscaron a uno de los mejores artistas y compositores experimentales de la época: Brian Eno.
Quizá no hayas escuchado mucho sobre Brian Eno, pero debes saber que es uno de los músicos más innovadores de las últimas décadas, habiéndose desarrollado en una gran variedad de géneros desde el rock, la música electrónica, el ambiente y, por supuesto, los sonidos experimentales. También ha trabajado con artistas de la talla de U2, David Bowie, Talking Heads, Coldplay, etc.
Microsoft contactó a Brian Eno debido a su gran calidad como diseñador de sonido de atmósfera. Cuando este aceptó, la empresa fue muy precisa en lo que buscaban: un sonido “sentimental, emocional, futurístico, optimista e inspirador”.
Según una publicación de Techtalk, para aceptar el trato, Eno y Microsoft acordaron un pago de 35.000 dólares únicamente por el sonido inicial y no para todos los otros audios de sistema que se incluyeron. Por supuesto, al compositor no le bastó con un intento y creó un aproximado de 85 piezas musicales cortas (o ‘microcanciones’) hasta dar con la pieza que ya todos conocemos.
Es probable que Eno haya tomado el reto de manera entusiasta, pero lo que seguramente quedará en la historia como algo insólito es que él mismo reveló no ser un usuario activo de Windows. Esto fue lo que comentó para una entrevista a Mental Floss publicada en 2013:
“La idea apareció en un momento en el que estaba completamente desprovisto de ideas. Había trabajado en mis propios temas ya por un tiempo y me encontraba perdido. Aprecié mucho cuando vino alguien y me dijo: ‘Tenemos un problema específico, resuélvelo para nosotros’. El tipo de la agencia me dijo: ‘Queremos una pieza musical que sea inspiradora, universal, blablablá, futurista, sentimental, emocional’ y toda esa lista de adjetivos. En la parte inferior decía bien claro: ‘Debe durar 3,25 segundos’. Pensé que era muy divertido e increíble intentar hacer una pieza tan pequeña, como una pequeña joya. En total, hice 84 piezas. Me metí por completo en ese mundo de las ‘microcanciones’. Cuando volví a trabajar con temas que duraban tres minutos, los sentía como océanos de tiempo”. Adicionalmente, Eno confesó: “Nunca he usado una PC en mi vida. No me gustan. Usé una Mac para componer las piezas”.