El USB Implementers Forum (USB-IF) acaba de anunciar que la potencia de carga del conector USB-C, que llega a la versión 2.1, aumenta desde los 100 vatios actuales hasta nada menos que 240 vatios. Con ello, la mayoría de los portátiles del mercado no necesitarán estar equipados con un conector de carga propietario y específico.
Cada vez más dispositivos utilizan el conector USB-C para funcionar, pero en la industria de los portátiles esto se ha visto bastante frenado por la escasa potencia del conector. Sin embargo, con este nuevo aumento de potencia será suficiente para los exigentes portátiles gaming actuales.
El cambio viene con la especificación Extended Power Range (EPR). Según el documento de revisión 2.1, la nueva norma amplía la potencia máxima y garantiza seguridad a las recargas que superan el techo actual de 100 vatios.
Se necesitará, evidentemente, nuevos cargadores, cables USB-C y dispositivos que soporten el estándar. Los accesorios deben tener marcado electrónico y un indicador visible para detallar si hay compatibilidad o no con el EPR. Otro requisito es admitir una operación funcional informada de 50 V y 5 A.
La novedad tiende a beneficiar a los dispositivos que dependen de mucha energía para funcionar. Además de los teléfonos móviles, algunos portátiles más nuevos también utilizan el puerto USB-C para cargar la batería, por ejemplo. Entre ellos se encuentra el MacBook Pro (Intel) de 16 pulgadas , que va acompañado de un adaptador de 96 W.