Actualizar el software de nuestros teléfonos es elemental para mantenerlos seguros y protegidos. Sin embargo, Apple, tras lanzar la última actualización de su sistema operativo, ha facilitado accidentalmente que se pueda ‘hackear’ los iPhone.
Esto se debería a que la compañía reintrodujo, por error, una vulnerabilidad en iOS 12.4, versión disponible desde el pasado 22 de julio, que ya se había corregido en iOS 12.3 y la cual había sido detectada por los ingenieros de seguridad de Google.
Esto permitió que Pwn20wn, un investigador de seguridad, pudiera desarrollar un jailbreak para los dispositivos con iOS 12.4 y que luego lanzó de forma pública y gratuita, algo que nadie estaba dispuesto a hacer desde hace muchos años porque Apple procedía a parchar la vulnerabilidad rápidamente.
El jailbreak es un método que permite anular las restricciones de seguridad impuestas por Apple en iOS y es un equivalente al ‘root’ en Android. Este procedimiento permite a los usuarios tener acceso a todo el sistema operativo, pudiendo instalar o modificar elementos del software y descargar apps que no están disponibles en Apple Store.
No obstante, a pesar del gran provecho que se le puede sacar al jailbreak, esto también hace que se pierda ciertas protecciones de seguridad, facilitando que los piratas informáticos puedan hackear el dispositivo.
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Hasta que Apple no presente una nueva versión del sistema operativo que corrija esta vulnerabilidad, la principal recomendación de los expertos en seguridad es tener cuidado con las aplicaciones nuevas que se instalen desde App Store.