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Sociedad

Sismo de magnitud 5.2 remece Pisco y causa derrumbe en carretera

Alarma. Temblor trajo el recuerdo amargo del terremoto del 2007. Indeci señala que no hubo daños personales. Población iqueña salió a las calles. También fue sentido en Lima.


Bloqueo. Hubo un derrumbe en la carretera Los Libertadores, zona de Humay, en Chincha. Foto: difusión.

El fuerte temblor les trajo por unos instantes el recuerdo de lo ocurrido en 2007.

Y es que no fue poca cosa. El sismo de magnitud 5.2, que tuvo una profundidad de 47 kilómetros, sacudió la provincia iqueña de Pisco y provocó la caída de rocas en la carretera Los Libertadores, vía que une a Ica con las regiones de Huancavelica y Ayacucho.

Pero además obligó a los iqueños a salir de sus casas o trabajos para ponerse a buen recaudó ante la posibilidad de que el movimiento telúrico fuera a incrementarse en intensidad. Por suerte no fue así y la calma volvió a Pisco y a otras provincias de Ica al cabo de unos minutos. También fue sentido en Lima y Huancavelica, pero con menor intensidad.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), el movimiento sísmico fue percibido leve en los distritos El Ingenio y Marcona (Nasca), así como en Llipata y Río Grande (en la provincia de Palpa).

Mientras que en las jurisdicciones situadas en las provincias de Ica, Chincha y Pisco fue de percepción moderada. No se han reportado casos de personas afectadas en su salud.

El sismo se registró a las 11:31 horas y su epicentro se localizó en el océano Pacífico, a 16 kilómetros al noroeste de la ciudad de Pisco, distrito y provincia del mismo nombre.

Derrumbe y bloqueo

Ahora bien, de acuerdo con un reporte de la  Dirección Desconcentrada del Indeci en Ica, se sabe que a causa del fuerte sismo se registró la caída de rocas en la Vía Nacional PE-28A, carretera Los Libertadores, sector Tambo Colorado, distrito de Humay, provincia de Chincha. El derrumbe ocasionó la interrupción del tránsito durante varias horas.

Por su parte, la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú descartó que el fuerte sismo de magnitud 5.2 genere un tsunami en el litoral peruano.

El 15 de agosto del 2007, un terremoto de magnitud 7.9 dejó 595 muertos, 2.291 heridos, 76.000 viviendas destruidas o inhabitables, y 450.000 personas resultaron damnificadas.