Desde la semana pasada, cientos de ciudadanos extranjeros se quedan al lado de la carretera Tacna-Arica, en el mismo límite entre Perú y Chile, y tratan de ingresar de forma irregular al Perú. La policía peruana y carabineros de Chile se han apostado en el límite para resguardar la frontera ante los problemas y bloqueos registrados en la carretera.
El jefe de la comisaría de la Concordia, capitán de la Policía Artemio Centty Valdivia, detalló que el último domingo, por la mañana, un grupo de migrantes trató de bloquear la carretera Tacna-Arica, impidiendo el paso de vehículos. La Policía tomó control del tramo, pero por la noche el número de extranjeros aumentó.
Centty convocó a su par chileno, jefe de la comisaría del complejo fronterizo Chacalluta (Arica), para que también se sume al resguardo de la vía, resaltando que los extranjeros apostados en la carretera estaban dentro de territorio chileno. Finalmente policías y carabineros despejaron la vía en medio de los reclamos de los migrantes.
El último lunes a la zona de frontera arribaron agentes antidisturbios de Arequipa para apoyar el trabajo de los policías tacneños. Por su parte, los migrantes, de nacionalidad venezolana y haitiana, afirmaron que desean ingresar a Perú para retornar a sus países de origen. Dejan Chile por la falta de empleo y las políticas migratorias que les dificultan su estadía regular.
Para ingresar al Perú, los ciudadanos venezolanos requieren de sus pasaportes y una visa. Solo están exonerados de ese requisito los mayores de 60 años que sean padres y madres de residentes en Perú, los padres y madres de menores de edad residentes, menores de edad con padres residentes, mujeres embarazadas en estado de vulnerabilidad y personas con grave enfermedad o en situación de extrema vulnerabilidad.
La crisis migratoria no solo está en la frontera, sino también en la ciudad de Tacna. Desde finales de febrero Chile, ha militarizado su frontera para evitar el paso irregular de extranjeros por las pampas que dividen a Tacna y Arica. Eso ha provocado que gran número de migrantes se queden varados en la ciudad de Tacna, sin posibilidades de ingresar a Chile por pasos irregulares como hicieron otros compatriotas suyos antes de la militarización de la frontera.
El jefe de la Macro Región Policial, Edinson Hernández Moreno, sostuvo que su institución estima que cerca de 15.000 extranjeros están en Tacna, muchos pretenden ir a Chile. La semana pasada, la Municipalidad Provincial de Tacna, el Ministerio Público y la Policía acudieron a la plaza Miguel Grau, óvalos y áreas verdes de la ciudad, donde migrantes han instalado carpas para pernoctar hace más de un mes.
Se trató de un megaoperativo de las autoridades que no tuvo éxito, pues los toldos no fueron retirados y los lugares públicos continúan ocupados por más de 100 personas. El alcalde de la provincia, Pascual Güisa Bravo, informó que en reunión con otras autoridades locales se propuso que se realice un traslado humanitario de los extranjeros hacia la frontera con Ecuador.
Indicó que la Organización Internacional para Migrantes tiene el censo de los extranjeros que desean regresar a sus países, y con esa información es posible el traslado. También solicitó al gobierno central vuelos humanitarios para los venezolanos y haitianos que están en la frontera.
A pesar de las propuestas, ni la Cancillería, ni otra organización del Gobierno central, se ha pronunciado sobre el tema o ha dado una solución a la crisis migratoria que viven los extranjeros.