Ante la llegada de las fiestas de fin de año, la Defensoría del Pueblo (DP) exhorta a la ciudadanía a no usar pirotécnicos, porque afecta la salud de las personas, sobre todo aquellas con epilepsia, autismo o discapacidades que, a causa del ruido, pueden presentar cuadros de estrés o ansiedad.
A decir de la DP, muchas personas con autismo tienen un procesamiento sensorial distinto, lo que las puede volver más vulnerables a los ruidos producidos por fuegos pirotécnicos. Otros grupos, entre los que están los adultos mayores, personas con afecciones respiratorias o problemas de salud mental, también pueden ser afectados por el ruido.
En esa línea, Bárbara, una joven con autismo, contó a La República que tiene hiperacusia, que le genera una hipersensibilidad auditiva y trastorno del procesamiento auditivo, lo cual provoca que no pueda discriminar los sonidos de fondo, y en estas fechas, que para muchos es sinónimo de paz y felicidad, vive momentos de estrés y angustia.
‘’Los pirotécnicos se escuchan como si estuvieras en medio del campo de batalla, como si estuvieras en medio de la guerra. Lo peor de todo es que las personas no entienden que no es mental o una cuestión de actitud, es fisiológico’', señala.
En tanto, la jefa del Mecanismo de Discapacidad asignado a la DP, Malena Pineda, señala que municipalidades como la de Lima, de San Borja, de Miraflores, Comas, San Isidro, Barranco, Surco, entre otras, cuentan con ordenanzas que prohíben el uso de la pirotecnia.
La DP detalló que en muchos casos la potencia del sonido que emiten los fuegos artificiales supera los 150 decibeles, cuando la OMS dice que ruidos superiores a los 60 decibeles pueden ser perjudiciales.