La mañana del 26 de octubre, Perú amaneció con el reporte de un caso de bullying dentro de las propias instalaciones del colegio Saco Oliveros. El padre de la menor denunciaba que su hija de solo 12 años sufría de bullying y, producto de ello, la adolescente cayó del cuarto piso de la institución. En esa línea, el progenitor aseguró que no se le brindó ningún tipo de ayuda ni menos una sanción a los agresores del caso.
Sin embargo, Luana es solo uno de los tantos casos que suceden en las sedes de Saco Oliveros y del Perú. Según cifras de la plataforma SíSeVe del Ministerio de Educación, hasta abril de 2022 se reportaron un total de 874 casos de violencia contra estudiantes de todos los colegios. En esa línea, gran parte de los agresores son los alumnos (490) mientras que la otra parte la completan los docentes y administrativos.
La República recopiló el testimonio de familiares de algunos exestudiantes, quienes señalaron que hay varios casos de acoso escolar dentro de la institución educativa Saco Oliveros. No obstante, las víctimas prefieren guardar silencio al ser un episodio muy fuerte en sus vidas y por no haber recibido la ayuda oportuna por parte de la institución.
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A. M. relata que su hermana menor sufrió bullying en la sede Montessori del colegio Saco Oliveros. Todo inició en 2013, cuando su familiar empezó a tener comportamientos extraños: no quería ir al colegio, se ponía a llorar y no quería ver a sus compañeros.
“Empezó con actos de que un día venía con el brazo pintado de lapicero con puras malas palabras y de índole despectiva (…) Hubo varios episodios fuertes para ella. Mis padres hablaron con los profesores para que puedan hacer algo. Pero solo le dijeron que iban a hacer seguimiento, por si pasaba algo. Pasó el tiempo y mi hermana no mejoraba”, señaló.
La joven mencionó que en una oportunidad, ella observó el acoso recibido por parte de alumnos a su hermana. Incluso, se acercó a conversar con ellos y posteriormente, sus padres hablaron con la dirección para dar solución.
“Nos decían que iban a hacer seguimiento, que la psicóloga iba a estar en el aula con ella todos los días. La historia se alargó tanto que al final mis papás se cansaron de tanto insistir, así que tuvieron que tomar la decisión de cambiarla de sede porque no quería ir al colegio, su carácter había cambiado bastante”, expresó.
A. M. cuenta que su hermana también señaló que su profesor de Matemáticas sabía del acoso recibido por parte de los alumnos y, por el contrario, la humillaba más frente a todos. “(Él) sabía que la molestaban y la sacaba al frente aun sabiendo que no sabía un ejercicio. Se ponía a decir ‘eres burra’ frente a la clase”, acotó.
La denunciante afirmó que sí se cuenta con psicólogos, pero para la cantidad de alumnos no hay abasto. Según declaraciones del decano nacional del Colegio de Psicólogos del Perú, Miguel Vallejos, a La República, Perú solo cuenta con 100.000 profesionales de esta carrera. Incluso, en un reporte hecho por Salud con Lupa, solo el 3% de colegios en nuestro país tiene al menos un psicólogo.
En investigación. Minedu, Indecopi y Defensoría verifican si el colegio había tomado acciones.
Pero no es el único caso. En 2017, en el Saco Oliveros de la sede La Victoria, una menor de edad casi termina con parálisis corporal a causa del acoso escolar sufrido. Según L. T., su hermana fue víctima de bullying en el aula y de manera cibernética. Sin embargo, pese a que la afectada denunció el hecho con su tutora y profesores, nadie le prestó atención.
En esa línea, la denunciante refirió que el propio plantel de docentes apañaba este tipo de bromas. En medio del acoso y la poca acción de las propias autoridades, un compañero de la menor le torció el cuello. “Llamaron a mis papás, la llevaron al Hospital del Niño de emergencia y, luego de hacerle estudios, el doctor le dijo a mis papás que por poco y se compromete la vértebra cerebral, lo que podría haberle ocasionado parálisis”, indicó a La República.
Los padres pidieron al colegio Saco Oliveros que se tome cartas en el asunto. Sin embargo, lo único que les mencionaron es que “darían seguimiento al caso y que ‘son niños, es propio de su edad’”. No tomaron medidas de prevención ni nada.
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La representante de la Adjuntía de la Niñez y Adolescencia, Tania Palomino, precisó que es necesario actuar con prevención y estar vigilantes. “Es importante capacitar no solamente a los docentes o a los directivos, sino también a los estudiantes. Asimismo, de forma permanente, estar atentos a cualquier riesgo de acoso escolar en diferentes espacios como el aula, los recreos, en las actividades fuera del colegio, en los patios, en los pasillos, en los baños o en el interior de los servicios higiénicos y en todo espacio”, puntualizó.
Por otra parte, la funcionaria pidió estar vigilantes con todo el plantel educativo al detectarse un caso de acoso. “Recordemos que no solo es la víctima y agresor, también están los testigos, quienes forman parte del problema”, dijo.
Ante la situación de la menor víctima de bullying, decenas de casos han salido a la luz, en los que se menciona que existe poca supervisión por parte de los directivos y los propios tutores. Además, a pesar de las denuncias, el colegio siempre respondía que harían seguimiento de cerca.
En declaraciones a La República, los directivos de Saco Oliveros han negado la existencia del bullying dentro de sus sedes. Sin embargo, según información de Indecopi, a la fecha la institución tiene 11 sanciones, entre ellas, por temas de violencia escolar y violencia por parte de los docentes a los estudiantes.
La República también estableció comunicación con la Defensoría, quienes mencionaron que están culminando las investigaciones con respecto al tema y así dar recomendaciones para evitar nuevos casos de acoso.
El caso de Luana y demás estudiantes no solo refleja la situación del bullying en los colegios Saco Oliveros, sino una problemática en la realidad peruana que aún se mantiene invisible y silenciada.
Si eres testigo o víctima de un caso de violencia o acoso escolar, repórtalo a través de la plataforma www.siseve.pe o a la línea gratuita 0800-76-888.
Si un colegio ha incumplido con las medidas antibullying, el padre o la madre pueden reportar el caso a Indecopi. Las vías son: sacreclamo@indecopi.gob.pe o por la plataforma https://enlinea.indecopi.gob.pe/reclamavirtual; también por las líneas 224-7777 (Lima) y 0800-4-4040 (provincias).