Con información de Karla Cruz / URPI –LR
Eran las 9.00 p. m. del último viernes 10 de septiembre cuando una combi sin pasajeros perdió el control y quedó colgada sobre una pequeña y precaria vivienda del distrito de Independencia.
Al interior del inmueble estaba Gianinna Quispe y sus dos hijos, quienes ya se disponían a dormir. Todo marchaba con tranquilidad, hasta que un fuerte estruendo llamó la atención de todos. La mujer salió y se dio con la sorpresa de que la custer estaba en su techo.
Según los testigos, el chofer y el cobrador habrían estado consumiendo licor; sin embargo, ellos desmintieron esta versión. En su lugar, dijeron que se desviaron por una piedra que estaba en el camino.
“Los vecinos me dicen que ellos (chofer y cobrador) estaban tomando dentro del carro, que son extranjeros, pero ellos niegan que han estado tomando y dicen que una piedra se atravesó en su camino. Yo estaba ahí con mis hijos, menos mal salimos de ahí y el carro está colgando sobre mi cuarto.”, narró la dueña del predio a La República.
Todo ocurrió cuando la combi descendía por la calle 5 de Enero, Nueva Generación, en Independencia. Vecinos aseguraron que esta vía no está habilitada para el transporte público, ya que la pista es delgada y precaria.
Finalmente, los vecinos amarraron el vehículo con una soga para evitar que se caiga por completo sobre la casa. La agraviada pidió apoyo a las autoridades para refaccionar su vivienda.
“Quisiera saber quién me va a responder, quién se va a hacer responsable. Mi casa es humilde, pero con esfuerzo hice las cosas”, lamentó.