La empresa de oxígeno Martín denunció recibir amenazas por parte de mafias. Ante la posibilidad de cualquier atentado, los familiares de pacientes con SARS-CoV-2 temen que el local cierre sus puertas.
Ese es el caso de Tatiana Cubas Vásquez, quien tiene a su cuñado aislado en vivienda debido a la neumonía que la COVID-19 le ha causado. Ella permanece, desde el domingo, en la fila para la recarga de oxígeno gratis en el negocio de Villa El Salvador.
Ella está en el segundo grupo de los próximos 200 para acceder a un lugar en la lista empadronada, sin embargo, teme que debido a las amenazas el establecimiento paralice su atención.
“Tiene la saturación de 80-82 y diario necesita un balón de oxígeno. Sin este vital elemento mi familiar se muere”, comentó en diálogo con La República.
En ese sentido, hace un llamado a la Policía Nacional a fin de que se constituyan a la zona para restablecer el orden e impedir cualquier atentado a dicho negocio. Piden que no se repita lo ocurrido en OxiRomero y Criogas, ubicados San Juan de Miraflores y en el Callao, respectivamente.
“Como cualquier persona tienen miedo, hay tanta delincuencia. Es mejor que esté la Policía, que no se mueva y si pasa algo que ahí esté. De repente se fue a desayunar, pero debería ser permanente”, invocó Raúl Asencio, uno de los usuarios en la fila.
Con el anunció de la maderera Martín acerca de la ampliación de su capacidad a 200 balones diarios, el número de personas que esperan en los exteriores de la empresa ha ido en aumento.