En 2019, el 39% de los niños entre seis meses y menos de tres años de edad padecía anemia en la región Lambayeque. Ese porcentaje, lamentablemente, se mantiene en este 2020, por las consecuencia que origina la pandemia del coronavirus.
De acuerdo con la Encuesta Nacional Demográfica y de Salud Familiar (Endes) 2019, elaborada por el INEI, Lambayeque logró reducir la prevalencia de anemia en dicho grupo etario hasta el 2.0% del 2018 al 2019. Sin embargo, la crisis de la pandemia del coronavirus han contenidos algunos esfuerzos por combatir el problema.
PUEDES VER Lambayeque: municipalidades recibieron más de S/19 millones para ejecución de obras
Además, según directivas del Ministerio de Salud (Minsa), cada niño debe recibir gotas de hierro desde el cuarto mes diariamente. Cuando el diagnóstico es positivo, al niño se le dará un tratamiento con sulfato ferroso en jarabe, que se complementa la atención en los centros de salud con una labor de seguimiento y consejería a domicilio.
Giovanni Portocarrero Guerrero, coordinadora regional de Alimentación y Nutrición Saludable de la Gerencia Regional de Salud (Geresa), señala que una de las principales dificultades ha sido realizar el seguimiento en los centros de salud porque muchos trabajadores de salud dejaron de trabajar por ser pacientes con morbilidades o se infectaron en cumplimiento de sus funciones.
“Las condiciones familiares y de los establecimientos de salud hacen prever que los índices de anemia se mantienen igual que el año pasado. La atención en centros de salud es limitada en cuanto a recursos, sin embargo, ya se están reactivando algunos servicios”, detalla.
En base al “Plan Nacional para la Reducción y Control de la Anemia Materno Infantil y la Desnutrición Crónica en el Perú: 2017-2021”, médicos y enfermeras deben realizar un monitoreo de los menores que padecen anemia.
Al respecto, Portocarrero precisa que implementarán centros de atención temporal en el coliseo de la ciudad de Chiclayo, a fin de dar atención a pacientes con todo tipo de morbilidad, incluido los diagnosticados con anemia.
“Lo que se realizará es trasladar algunas atenciones que se hacen en los centros de salud en un espacio con condiciones para la población. Y se va a dar prioridades a casos como son las inmunizaciones y los pacientes con anemia. Es una estrategia que se va ampliar en las tres provincias”, menciona.
Para Luís Montenegro Serquén, presidente de la Mesa de la Concertación de la Lucha contra la Pobreza, el índice de anemia puedo haber aumentado en estos últimos meses, por factores sociales y sanitarios.
“No solo es problema de los centros de salud, sino también que las familias ahora son más pobres y no se alimentan de manera adecuada. Y los más afectados son los niños, pues requieren de una alimentación saludable y nutritiva”, subraya.
Tanto Luís Montengro y Giovanni Portocarrero coincidieron en que la instalación de centros de atención temporal ayudarán a mejorar la atención de niños y mujeres embarzadas que sufren anemia y otras enfermedades.
Una primera propuesta es llegar a las zonas andinas, caracterizadas por los altos índices de desnutrición.
Suscríbete aquí al boletín de La República y recibe a diario en tu correo electrónico toda la información sobre el estado de emergencia y la pandemia de la COVID-19.