La sangre casi llega al río. El jefe de la oficina de Seguridad Ciudadana, Luis Miranda Orué, junto a un agente municipal resultaron lesionados durante las acciones de recuperación de espacios públicos ejecutadas por la comuna de Chiclayo como parte del mandato judicial que ordena el lanzamiento de las calles de los vendedores informales.
La agresión se produjo en la calle Héroes Civiles y Arica, en instantes que los policías municipales realizaban su labor de desalojo de los ambulantes, al existir una medida judicial que así lo determina. Fue entonces que una turba los atacó.
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El municipal Luis Felipe Bueno Pizarro (20) fue apuñalado en el pecho, mientras que el gerente de Seguridad Ciudadana de la comuna de Chiclayo, Luis Miranda, fue alcanzado por un objeto contundente que le cayó en el rostro y le provocó una herida. También la agente municipal Sabina Palomino Roncal fue mordida en su brazo.
El funcionario sindicó como responsable directo del ataque a un pseudo dirigente de apellido Callao, quien azuzaba a la gente para que los agreda. Se detuvieron a tres sospechosos, los que vienen siendo investigados por el delito de lesiones, ya que son señalados de ser los que atacaron al jefe del Serenazgo y a uno de los agentes municipales.
También se dijo que los informales habían traído delincuentes de Lima y El Callao a fin de que se enfrenten a la Policía. Aunque todavía no se ha revelado las identidades de los sospechosos trascendió que estos serían limeños, por lo que se están averiguando sus antecedentes.
Fuentes policiales afirmaron que los ambulantes también han contratado a los extranjeros para que hagan resistencia y puedan retardar su salida o en mucho de los casos vencer a la autoridad edil.