Roberth Orihuela Q.
El número de afectados, por la suspensión de vuelos de Peruvian Airlines, aumenta día a día. Hasta ayer, a nivel nacional, sumaban 1200 y, en Arequipa, se reportó que eran 40. Sin embargo, el número crecía mientras pasaban las horas, explicó la jefa regional de Indecopi, Lucía Cornejo, a una radio local.
La funcionaria pidió a los perjudicados empadronarse en la lista que elabora Indecopi, en su oficina ubicada en la Mz. O, Lt. 20, de la urbanización Nueva Esperanza del distrito José Luis Bustamante y Rivero. Esto servirá, sostuvo Cornejo, para iniciar un proceso sancionador contra la empresa y, luego, conseguir la devolución del dinero que los pasajeros pagaron por los vuelos.
Un grupo de clientes de Peruvian acudió ayer a Indecopi luego de hacer un plantón en la oficina de la aerolínea en la ciudad, asentada en la segunda cuadra de la calle La Merced del Cercado.
Algunos de ellos contaron que debieron pagar pasajes de bus para llegar desde Lima hasta Arequipa. Dijeron que viajaron por vacaciones y que también regresarían por tierra.
Otros compraron con anticipación sus pasajes también para disfrutar de sus vacaciones. “He comprado cuatro pasajes de ida y vuelta, con escala en Lima, a Tarapoto (San Martín). ¿Qué voy a hacer ahora?”, indicó una de las perjudicadas.
La suspensión de las operaciones de Peruvian, por el embargo de Aduanas a sus cuentas, no solo afecta a pasajeros, también a reservaciones en hoteles y restaurantes, paquetes de viaje otorgados por agencias y otros.
Para los que sí es urgente tomar un avión, no les quedó otra cosa que pagar US$ 400 por pasaje. En otras aerolíneas, se habilitaron lugares a US$ 50, pero se acabaron rápido.
Tal ha sido la crisis que incluso el gobernador Elmer Cáceres Llica estuvo buscando un vuelo el domingo para viajar a Lima y estar presente en la audiencia de revisión de la licencia a Tía María, por parte del Consejo Nacional de Minería.